(Fuerza Latina – Verdad y Vida).-
Cuba ha sufrido una transición luego su nueva relación con los EE. UU, que ha renovado un interés por el evangelio en la isla y por todos los procesos que ha atravesado la iglesia en los últimos 50 años. En ese sentido, muchos creen que las dificultades y sufrimientos han allanado el camino para una explosión de plantación de iglesias.
No hay razones ni motivos que obliguen al pueblo a quedarse en sus casas sin congregarse, la comodidad no es un factor; en un típico domingo por la mañana en Cuba, se pueden encontrar iglesias en toda la isla rebosante de fieles. Muchos se encuentran en los hogares y otros se reúnen en las iglesias.
El espacio es el mayor desafío para muchas iglesias. Bajo las reglas actuales del gobierno por lo general no pueden comprar tierras o expandirse. Debido a esta prohibición han optado por realizar construcciones arriba de las edificaciones a medida que crecen el número de creyentes.
De acuerdo a CBN News, el pastor Néstor y su esposa Rosa viven en una casa y sobre ella esta edificada la iglesia. «Una de las cosas que ha hecho crecer en la fe ha sido las limitaciones y las dificultades», dijo. «A veces, sin sufrimiento no hay desafío. Y sin ese reto, no hay victoria», afirmó el pastor.
El crecimiento de la Iglesia en Cuba es aún más milagroso dada la pobreza del país. Aun así, las iglesias cubanas son conocidas por su generosidad y disposición a sacrificarse por el bien del Evangelio.
Otro obstáculo que enfrentan las iglesias cubanas es la guerra espiritual en la forma de la santería. Es un sistema de creencias influenciadas por las religiones de África Occidental. La santería es conocida por sus rituales y ceremonias.
El pastor Néstor se ha enfrentado a la resistencia de estos grupos. Durante un culto dominical seguidores de la santería estaban justo fuera de la iglesia y comenzaron a golpear sus tambores. «Fue como una especie de guerra espiritual cara a cara», recordó. «La iglesia comenzó a orar y comenzó a haber truenos y a llover, los santeros y brujos tuvieron que irse».
En medio de toda la oposición y el sufrimiento, líderes de la Iglesia en Cuba dicen que están disfrutando de una nueva temporada pese a las restricciones. Evangelizan en todas las localidades de la isla y pueden realizar eventos especiales en los cuales han tenido un apoyo numeroso de todos los creyentes y líderes cristianos.◄