(Protestante Digital – GWOZA).-
La acción violenta de Boko Haram sigue sin disminuir en la zona norte de Nigeria, principalmente en el estado de Borno. A principios de agosto se produjo un ataque en Gwoza, ciudad de mayoría de población cristiana, donde un centenar de personas perdieron la vida y muchos otros huyeron para sobrevivir.
Pirda Tada, un sobreviviente, dijo: «Gracias a Dios por haber salvado mi vida, pero tres de mis vecinos y miembros de nuestra iglesia fueron asesinados durante el ataque», en declaraciones que recoge Christian Today. «Varios cristianos en nuestro pueblo fueron degollados con cuchillos. Algunas casas fueron bombardeadas mientras los atacantes de Boko Haram cantaban ¡Alá es grande! en árabe», relata la testigo.
Según información de medios locales, recientemente se produjo el secuestro de 100 jóvenes en la ciudad de Doron Baga, también en el estado de Borno. El secuestro, según los expertos, es otro método que utiliza el grupo para alistar forzosamente a jóvenes a su lucha. El rapto se produjo cerca del lugar donde más de 200 chicas fueron secuestradas hace exactamente cuatro meses, sin que todavía hayan sido rescatadas ni se sepa sobre su paradero.