(Verdad y Vida).-
Tras el anuncio de su postulación a las presidenciales 2018, Javier Bertucci realizó una rueda de prensa en Caracas donde habló por primera vez sobre su plan de gobierno y algunas de las necesidades del país en las que se enfocaría de resultar electo como presidente de la República de Venezuela. Así también ha sido entrevistado por diferentes medios de comunicación nacionales donde continuó hablando de un mensaje lleno de valores para una sociedad quebrantada.
Bertucci aseguró que su decisión vino por ser un «apasionado de este país» y tras ver el sufrimiento, las lágrimas de madres, niños, abuelos donde ha hecho trabajos sociales, vio la necesidad de liderazgo de este pueblo y decidió dejar a un lado la organización que había levantado con mucho trabajo en beneficio del país y postularse como candidato para suplir esa carencia de liderazgo.
Opinó Bertucci que el país está profundamente dividido, lo que impide que avance. Desde sus inicios en la organización El Evangelio Cambia, el discurso de Bertucci ha versado sobre la reconstrucción de los valores en la sociedad venezolana, tomando ahora esta premisa como uno de los enfoques de su plan de gobierno.
Candidato independiente
Javier Bertucci decidió postularse como candidato independiente, aunque señaló que hay partidos políticos de oposición que terminarán respaldándolo, así como también informó que probablemente hay otras personas que terminarán postulándose a las presidenciales. Considera que si alguien quiere lanzarse debería hacerlo, porque están en su derecho.
En una entrevista para medios internacionales se le consultó al candidato sobre su posición religiosa como pastor, respecto a la prohibición en el Artículo 227 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que establece que para ser presidente una persona no puede estar vinculada en organizaciones religiosas. Bertucci aclaró que él renunció legalmente a todo vínculo, tanto con la Iglesia Maranatha, así como con la organización sin fines de lucro El Evangelio Cambia, pero aclaró que «nadie puede quitarme mi fe. Siempre seré un amante de Dios, de las cosas de Dios y donde pueda llevar mis cristianos, los voy a llevar porque son valores que necesita el país».
Explicó Bertucci que ante la posibilidad de gobernar un país de mayoría católica, seguiría con el plan de mantener una visión incluyente en todos los aspectos, bien sea que la persona tenga fe en Cristo o en la iglesia católica. «Jamás he atacado a otras religiones, Cristo nos une», aseguró.
Plan de gobierno
Respecto a la violencia criminal en el país, aseguró que se necesita desmontar el «pranato» que hay en el país, por lo que se enfocará en un plan de incentivos, así como el mejoramiento y modernización de las fuerzas policiales. «Es un conjunto de medidas que tomar, pero sin dejar de lado que si no hacemos una corrección de valores esto no va a ser totalmente arreglado», aseguró.
Respecto a la hiperinflación del país, «definitivamente tenemos un problema grave», dijo. Su plan «empieza por levantar el control cambiario y por activar todo el aparato productivo del país para tener una economía real». Agregó que es fundamental la activación del empleo en una pequeña y mediana industria para salir del problema económico.
Respecto a los controles de natalidad y educación sexual, «es un tema que hay que abordar con mucha responsabilidad en las escuelas». Este país tiene uno de los índices más altos en embarazo precoz en Latinoamérica, por lo que planeta «regresar a la educación sexual pero con valores».
También incluyó la necesidad de solventar la situación de la escasez de medicamentos a través de los países amigos.
Acusaciones
Javier Bertucci se vio envuelto en acusaciones en el pasado. Has pasado 12 años desde que fue objeto de una imputación por tráfico de diésel, e inclusive estuvo preso en su casa por un tiempo. El ahora candidato a las presidenciales no fue condenado ni enjuiciado, situación que ha aclarado en varias oportunidades.
Igualmente sucedió hace un par de años cuando su nombre apareció en los Papeles de Panamá, producto de una mala negociación que intentó hacer para importar carne para usarla en las actividades de corte social de la organización El Evangelio Cambia. La negociación no se llevó a cabo, pero su nombre igualmente quedó vinculado. Ya este caso fue aclarado.
Una esperanza
El pueblo tiene que tener esperanza, pero «el único Mesías es Jesús», dijo Bertucci, en cuanto a la esperanza que su postulación ha traído para algunos venezolanos. Aclaró que entiende que las personas lo vean a él como el que porta la esperanza de cambio para Venezuela e inclusive es algo que no puede evitar, pero asegura que la esperanza de Venezuela está en Cristo y no en su persona.
Cumplimiento profético
En el año 2012, el periódico Verdad y Vida publicó una entrevista realizada al entonces pastor Javier Bertucci, donde se le preguntó cómo «evitar que la política permee a Visión Reino [movimiento evangelístico y de intercesión de Bertucci] durante este año electoral tanto a nivel nacional, como en las regiones, a lo que el pastor Bertucci indicó que ‘no pierdan el tiempo los políticos en invitarme a actividades proselitistas porque no asistiré… nuestra visión es espiritual y es convertir a Venezuela a Jesucristo’».
Hoy, seis años después, se ve a un Javier Bertucci que mantiene su posición de no adherirse a ninguna tolda política, de convertir a Venezuela a Cristo, pero desde un púlpito diferente, como presidente de la República.
Concluyó Bertucci que su campaña no es financiada por la Iglesia Maranatha, así como claramente ha expresado que tampoco representa a la Iglesia Cristiana de Venezuela, su decisión ha sido personal y para ello se ha desligado del pastorado y de la labor social que venía realizando con su organización. También expresó que aunque no se le verá predicando más en los púlpitos, su mensaje continuará hablando de valores, pues nada lo prohíbe.◄