Verdad y Vida EL QUINCENARIO CRISTIANO DE VENEZUELA
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“Los evangélicos no somos homófobos. Respetamos y amamos a los LGTBI, defendemos su dignidad y condenamos cualquier agresión contra ellos, pero al mismo tiempo distinguimos personas de ideas”
(Tomás Gómez Bueno – ED).-
El secretario general de la Alianza Evangélica de España, doctor Xesús Manuel Suárez, sostuvo un diálogo en su visita a Santo Domingo el pasado mes de marzo con líderes evangélicos y autoridades de la Universidad Nacional Evangélica (UNEV), para compartir algunas de las líneas estratégicas que los protestantes de España están empleando para confrontar el avance de la Ideología de Género en su país.
La representación institucional de este encuentro fue encabezada por el reverendo Nersido Borg Cedeño, presidente de la Mesa de Diálogo y Representación Cristiana, el ingeniero Epifanio González, rector de la Universidad Nacional Evangélica (UNEV) y Salustiano Mojica, presidente de la Fundación Evangélica Universitaria; además la licenciada Joselín Rivera, por World Vision.
El encuentro fue coordinado por Samuel Guzmán, secretario ejecutivo de la Mesa de Diálogo y Representación Cristiana, la doctora Susana Sánchez, directora de la Escuela de Teología y Tomás Gómez Bueno, encargado de relaciones eclesiales de la Universidad Nacional Evangélica.
‘LA IDEOLOGÍA DE GÉNERO AMENAZA LAS LIBERTADES FUNDAMENTALES DE TODA LA SOCIEDAD’ (CONFERENCIA DE X. M. SUÁREZ)
Suárez expresó que la Ideología de Género es una amenaza no solo de la moral cristiana, sino también a nuestras libertades fundamentales por lo que exhortó a los evangélicos dominicanos a tener posiciones que sean bien articuladas y argumentos bien fundamentados si queremos construir estrategias racionales y eficientes.
Señaló que, en esta perspectiva, nuestro objetivo político frente a la Ideología de Género debe ser hacer ver y demostrar a toda la población, cristiana y no cristiana, que esa ideología es una amenaza para las libertades democráticas de toda la sociedad.
Destacó que durante siglos estas libertades han venido siendo amenazadas, “y hoy, aquí, en Latinoamérica, esas libertades que nuestros países han empezado a desarrollar se ven de nuevo amenazadas por un nuevo totalitarismo que viene oculto tras un vestido de falsa defensa de derechos humanos y de progresismo”.
En el diálogo con líderes evangélicos dominicanos, Suarez los exhortó a volver a levantarse en defensa de la libertad de conciencia, la libertad de expresión, los derechos de los padres y la soberanía de la familia frente a un nuevo totalitarismo que no nos amenaza estrictamente a nosotros, sino a toda la sociedad.
Declaró que los evangélicos no somos homófobos. “Respetamos y amamos a los LGTBI, defendemos su dignidad y condenamos cualquier agresión contra ellos, pero al mismo tiempo distinguimos personas de ideas, rechazamos la conducta homosexual y levantamos nuestra voz contra el lobby que se apropia, se adueña de la representación de todo ese colectivo para establecer privilegios inaceptables en cualquier democracia”.
Manifestó también que no podemos aceptar que se coarte nuestra libertad de expresión para presentar públicamente nuestra opinión, porque la libertad de expresión es fundamental en el sistema democrático. “Esto es una seria amenaza al sistema democrático, que es más seria porque se envuelve en un traje de falso progresismo”.
Enfatizó que el totalitarismo de la Ideología de Género no amenaza solo a los cristianos: “amenaza a toda la sociedad, porque sin libertad de conciencia para todos no hay democracia para nadie. Todo esto no es una amenaza solo para los cristianos: es una amenaza totalitaria al conjunto de la sociedad”.
Explicó que mientras persista la libertad de conciencia y la de expresión, cualquier totalitarismo tendrá dificultades para mantenerse: “por eso es fundamental para la Ideología de Género cercenar estas libertades y estos derechos. Sostuvo que nuestro objetivo es desmantelar los argumentos de la Ideología de Género, pero desde nuestra condición de cristianos”.
“Hermanos, tenemos la responsabilidad histórica de haber sido los principales promotores de estas libertades; reconozcamos nuestra propia historia y, a partir de ella, identifiquemos el momento que estamos viviendo y volvamos a convocar a toda la sociedad a defender estas libertades, no como algo que nos interesa particularmente a los evangélicos, sino como un objetivo fundamental para todo el mundo”.
Argumentó que la Ideología de Género no tiene fundamento científico alguno, pero que muchos no denuncian esto porque le temen al poder que yace tras esta propaganda. “La Ideología de Género se está imponiendo desde un total desprecio a la evidencia científica”.
“Escuchamos cada día frases que suenan como verdades indiscutibles y que son puros postulados ideológicos sin fundamento científico que se construyen de forma semejante a los dogmas medievales pre-científicos”, concluyó Suarez.◄
