“La libertad religiosa está bajo ataque en muchos lugares porque es peligrosa para aquellos que quieren tener el poder completo”, indicó Alito

(Christian Headlines).-
WASHINGTON.- El juez de la Corte Suprema de los Estados Unidos, Samuel Alito, advierte que la libertad religiosa está en peligro en todo el mundo, en parte debido a la disminución de la influencia de la religión misma.
“Es difícil convencer a la gente de que vale la pena defender la libertad religiosa si no creen que la religión es algo bueno que merece protección”, dijo Alito la semana pasada en la Cumbre de Libertad Religiosa de Notre Dame en Roma.
El desafío para aquellos que quieren proteger la libertad religiosa en los Estados Unidos y en otros lugares es “convencer a las personas que no son religiosas de que la libertad religiosa merece una protección especial”, dijo.
“Eso no será fácil de hacer”, agregó Alito.
Los comentarios de Alito fueron informados por la Facultad de Derecho de Notre Dame, que organizó la cumbre.
“Si miramos alrededor del mundo hoy, vemos que personas de muchas religiones diferentes enfrentan persecución debido a su religión”, dijo Alito al mencionar Irak, Nigeria, Egipto y China. “… La libertad religiosa está bajo ataque en muchos lugares porque es peligrosa para aquellos que quieren tener el poder completo. También es probable que surja de algo oscuro y profundo en el ADN humano: la tendencia a desconfiar y a disgustar a las personas que no son como nosotros”.
Alito hizo referencia a las muchas formas en que la sociedad se beneficia cuando se adopta la libertad religiosa, incluida la promoción de las obras de caridad, la tranquilidad doméstica y la diversidad de pensamiento. La libertad religiosa en su máxima expresión, dijo, permite que diferentes tipos de personas vivan juntas en armonía.
Citó a líderes de la historia que fueron impulsados por sus creencias religiosas, incluidos Martin Luther King Jr.
“Si se protege la libertad religiosa, los líderes religiosos y otros hombres y mujeres de fe podrán hablar sobre temas sociales”, dijo Alito. “Es menos probable que las personas con profundas convicciones religiosas sucumban a ideologías o tendencias dominantes, y más probable que actúen de acuerdo con lo que consideran verdadero y correcto. La sociedad civil puede contar con ellos como motores de reforma”.◄