Verdad y Vida EL QUINCENARIO CRISTIANO DE VENEZUELA
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La iglesia debe condenar todo lo que Dios condena y apoyar sin duda alguna, todo lo que Dios aprueba
El pulmón espiritual del mundo (América Latina) está en cuidados intensivos, debido a la negligencia cómplice de la mayoría de ministerios que guardaron silencio ante la aberrante descomposición social que promovió y ejecutó la élite oscura a nivel mundial ante las narices de la iglesia.
El mundo careció de oráculos proféticos que marcaran las coordenadas a seguir al cuerpo de Cristo. Solo unos pocos alzaron la voz con valentía y denunciaron a voz en cuello la perversión de esta élite oscura, que pretende establecer una tiranía mundial.
La mayoría de los ministerios guardaron silencio, unos pecaron por omisión, mientras que otros pecaron por comisión, al respaldar regímenes de izquierda que son contrarios a los principios de la Palabra de Dios, permitiéndole a los movimientos de ideología de género y pro abortistas avanzar sin posición, durante los últimos 20 años hasta tener éxito, tal y como sucedió en Argentina, donde se aprobó en las dos cámaras la legalización del genocidio de los no nacidos.
En EE.UU. muchos ministerios apoyaron al candidato que favorece estas políticas, en vez de apoyar al Ciro de Dios, que luchó contra viento y marea a favor de la familia y la iglesia, oponiéndose en todo momento al aborto y a la ideología de género, siendo él un instrumento de Dios, que defendió lo que la iglesia debía defender y no defendió.
Esta plandemia demostró más allá de toda duda, que faraón es quien da las órdenes a la iglesia y no Dios, la mayoría de ministerios aceptó los protocolos de Faraón sin mayor dificultad. Moisés estaría muy avergonzado de esta conducta pusilánime de los ministerios en la actualidad, los apóstoles se sentirían igual de decepcionados con esta conducta cobarde de la iglesia de la actualidad. Cuando los discípulos del Señor fueron confrontados para hacer algo que era contrario a lo que Dios les mandó, ellos respondieron radicalmente; “¿Es lícito obedecer a los hombres antes que a Dios?”. Esa valentía ha brillado por su ausencia en la actualidad, salvo contados casos.
Que algo sea legal no lo hace lícito ante los ojos de Dios, la iglesia debe condenar todo lo que Dios condena y apoyar sin duda alguna, todo lo que Dios aprueba. Dios no es neutro como algunos piensan, quien no recoge con Él desparrama.
La iglesia no puede llamar bueno a lo malo, tampoco puede mirar en otra dirección cuando nuestros políticos inmorales pisotean la Palabra de Dios.
Bien lo dijo Martin Luther King: Una nación se condena a sí misma, cuando el gobierno legaliza lo malo y prohibe lo bueno, mientras la iglesia guarda silencio cómplice.
Lamentablemente esto ha pasado en nuestro continente, y por ello nos encontramos en un monte Carmelo en la actualidad, donde Dios restaurará su altar y le cortará la cabeza (autoridad) a todo lo falso. La maldición no viene sin causa y el juicio comienza por casa, muchos ministerios perderán su autoridad, otros serán cortados de raíz, mientras que otros serán expuestos a la luz pública, como un ejemplo de lo que no se debe hacer.
Dios está a punto de hacer una jugada maestra en el escenario geopolítico mundial que lo cambiará todo
Dios hará algo inusual y sin precedentes en la historia, para preservar el pulmón espiritual de la humanidad, Dios volteará la tortilla en el inicio del 2021, sacará todo lo oculto a la luz y le cortará la cabeza a todo lo falso, pero antes permitirá por un breve tiempo, como lo ha hecho hasta hoy, que la humanidad experimente todo lo falso de las tinieblas, hasta que se decepcionen del modelo de autogobierno fallido y perverso con el que han sido engañados durante muchos años, por la mayoría de políticos corruptos, sin Dios, amantes del dinero y ajenos de su verdadera responsabilidad con el pueblo.
Después de todo esto Dios creará un hambre genuina por la verdad, iniciando un nuevo día para toda la humanidad, Dios tiene la última palabra en esta historia, no ningún anticristo como predican algunos, Él está a punto de hacer una jugada maestra en el escenario geopolítico mundial que lo cambiará todo.
El 2021 es el año de la revancha de Dios y el reseteo de la iglesia para dar lugar al Reino de Dios, será un reinicio a todo nivel en nuestra realidad, ya nunca más regresaremos a la antigua normalidad, vamos a construir de la mano de Dios una nueva realidad para toda la humanidad.
Solo para los entendidos en los tiempos.
Miguel Ángel León R.
Apóstol, psicólogo y escritor
