(Verdad y Vida – REDACCIÓN).-
Tras las elecciones del pasado domingo 14 de abril, y dado el estrecho margen arrojado en los cómputos anunciados al país por la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), que dieron ganador con 50,78% al Presidente(e) de Venezuela, Nicolás Maduro Moros; contra 48,95% del candidato opositor y gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles Randonski -quien de inmediato pidió un reconteo total de votos para poder reconocer los resultados-; lo que originó un clima de agitación donde grupos violentos han querido ‘pescar en río revuelto’ causando 8 muertos y decenas de heridos.
Ante esta situación la Iglesia de Jesucristo en Venezuela, con gran apoyo de muchos cristianos del mundo, redobló sus oraciones y clamor a Dios para el restablecimiento de la paz y la concordia en Venezuela; a fin de que se produjera un pronunciamiento del CNE que calmara los ánimos del pueblo, de lado y lado, quienes se han visto confundidos por el cerrado resultado en las elecciones presidenciales.
La auditoría electoral, una respuesta divina
Pues bien, la noche del 18 de abril, y tras ocho largas horas en reunión, los rectores del CNE, encabezados por la presidenta Tibisay Lucena, declararon al país que se llevaría a cabo una auditoría del 46% restantes de las mesas de votación (una 12 mil aproximadamente), a ritmo de 400 diarias, en un lapso de 30 días.
Este anuncio trajo una mayor tranquilidad y deja abierta la puerta para un acuerdo nacional definitivo que traiga sosiego al país. Este anunció del CNE ha sido visto por los cristianos venezolanos como una respuesta contundente a las oraciones y clamor que la Iglesia ha realizado en bienestar de la nación y para que la verdad salga a la luz.
Mientras los adeptos de cada opción manifestaban caceroleando, con fuegos artificiales, música, entre otros, la Iglesia de Jesucristo doblaba sus rodillas ante el Señor, el único que tiene la solución y la paz para Venezuela y el mundo entero. El miércoles 17 de abril a las 7:30 pm, hubo un acuerdo nacional de oración a Dios que cumplieron la gran mayoría de los cristianos en todo el país en favor de la paz nacional. Definitivamente que esta auditoría es una respuesta divina a las oraciones del pueblo de Dios.
Movimiento por la Paz se pronunció
Durante la mañana del 18 de abril Lorenzo Tovar, representante del «Movimiento por la Paz», hizo un llamado a todos los venezolanos a que practiquen la tolerancia, a propósito de los sucesos violentos ocurridos en el país tras las elecciones presidenciales.
«Cada minuto que no vamos al conteo de los votos está originando posiciones radicales», expresó. Precisó que ni los mismos funcionarios de seguridad han podido controlar la violencia que se ha originado. Indicó que ha recibido llamadas de personas del 23 de Enero y Catia que han sido amenazadas y agredidas sólo por tocar cacerolas.
Días antes de las elecciones, Lorenzo Tovar había señalado: «Nosotros los que profesamos la fe de nuestro Señor Jesucristo, tenemos que proteger nuestra convicción y llamamos a todos los venezolanos, a orar por la reconciliación de nuestro pueblo».
Bochorno legislativo
Otro aspecto que tiene preocupados a gran parte del liderazgo cristiano venezolano es el enfrentamiento que existe en el seno de la Asamblea Nacional (AN), cuando a dos días de las elecciones hubo agresiones verbales y físicas entre los parlamentarios, saliendo herido el diputado merideño, William Dávila, a causa de un golpe propinado con un micrófono sobre su ojo izquierdo que casi le desprende la córnea, para lo que tuvo que tomarle 16 puntos de sutura.
Durante la misma sesión, el presidente del parlamento, diputado Diosdado Cabello, le negó el derecho de palabra a sus pares opositores «si no reconocen a Maduro como Presidente de la República», conminándoles a que «se larguen si quieren» del seno de la AN. Ante ello el pueblo cristiano llama a la calma y al entendimiento, pues si la AN no da el ejemplo, difícilmente se podrá lograr la tan ansiada paz nacional.
Un llamado a la paz
Un reconocido líder nacional, quien pidió no ser identificado por motivos obvios, indicó que «Venezuela requiere de un liderazgo responsable que de verdad represente al país con respeto y altura, ya que el pueblo venezolano no se merece este trato por parte de sus líderes, además, tememos que el país no tolere esta situación por mucho más tiempo y se desencadene mucha más violencia que la vista hasta ahora. Las oraciones de la Iglesia son las que en verdad están moviendo la mano de Dios en favor de la nación, y éstas van dirigidas para que el Señor saque todo a la luz y ponga orden».
Repuntó el ministro cristiano que «es necesario que se respeten los resultado de las elecciones, lo cual se alarga ahora por un mes más de tensiones. Si ganó Maduro, pues que gobierne con inclusión y respeto al resto de los que no votaron por él; y si se demuestra lo contrario, que el gobierno acepte con hidalguía lo que demuestre la auditoría; igualmente para la oposición. Nunca olviden que Dios tiene el control y la última palabra en Venezuela, lo que Él decida nada ni nadie lo podrá detener».

