El objetivo de estas fiestas es resaltar a Jesucristo, sacando de ellas todo judaísmo aseguró el apóstol Landaeta.
(EG – Verdad y Vida).-
Con la participación de varias iglesias cristianas que hacen vida en el estado Nueva Esparta, el domingo 9 de junio, se dieron cita en el salón de Convenciones del hotel Venetur Margarita, con el objetivo de celebrar la «Fiesta de Pentecostés» en la región insular.
El apóstol Daniel Landaeta, coordinador del evento y encargado de la apertura, le dio la más cordial bienvenida a todos los presentes, manifestando la reverencia que los hijos del Reino deben mostrar al gran invitado, el Espíritu Santo.
Con danzas, alabanzas, adoraciones y la participación de varios ministros de la región, se impartió al pueblo de Dios, donde hasta el cielo se manifestó con una lluvia espiritual. El pastor Norbey Rodríguez, nuevo presidente de la Confraternidad de Ministros del estado Nueva Esparta, manifestó que «la tecnología nos la entregó Dios, para correr el mensaje de Él, y usarla con sabiduría».
En cuanto a las personas que no son originarias de la isla de Margarita, Rodríguez esbozó el pasaje bíblico de Efesios 2:19, «usted no está aquí como extranjero ni advenedizos, debemos ser reflejo de que el Espíritu Santo mora en nosotros, Bernabé era lleno del Espíritu Santo». Asimismo, propuso la unificación de la Iglesia neoespartana, «no hay nadie mejor en el Reino de Dios, el mejor es Jesucristo, seamos una sola Iglesia, un solo Dios y un solo Espíritu».
PROFECÍA PARA VENEZUELA
El profeta Raúl Barros, oriundo de Colombia, expresó en su participación la antítesis que señala que «el evangelio no resplandece» y por otro lado la tesis «levántate y resplandece…», haciendo alusión a «que en Venezuela ya basta del ‘espíritu de superioridad’, porque de estos líderes llenos de idolatría y soberbia las tinieblas se aprovechan, Dios está levantando una generación como la de José, el profeta Daniel, hay una llama de Dios encendiéndose en Nueva Esparta», recalcó.
Barros como parte de la organización celestial (profeta), dio a conocer que «la Iglesia de Nueva Esparta, tiene que entrar en el tiempo del Espíritu Santo, no más tiempos de retraso como los que se vivió con Simón Bolívar, Guaicaipuro, María Lionza, los cumanagotos comían 300 gramos de tierra, no voy a soportar ver a la gente comiendo tierra».
De igual manera destaca «ya no más tiempo de demonios, hechicería y escasez, es tiempo de la Iglesia, hay congregaciones que no mueven ni una mosca, debemos cerrar un tiempo y abrir otro» de la mano del Espíritu Santo. Barros argumenta «la idolatría embrutece a la gente, en Venezuela se camina sobre riqueza, la misma es para servir a la Gloria de Dios».
Finalmente, los pastores presentes subieron a tarima para orar como cuerpo de Cristo por el bienestar de Nueva Esparta y Venezuela.◄