
(Evangélico Digital).-
La Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa aprobó una resolución sobre la protección a la libertad religiosa y de creencia en el lugar de trabajo.
En la resolución se pide a los Estados miembros que “adopten todas las medidas necesarias para combatir la discriminación basada en la religión o las creencias en todos los ámbitos de la vida civil, económica, política y cultural”.
También les pide que “promuevan la labor de las instituciones nacionales de derechos humanos en la lucha contra la discriminación, incluida la discriminación indirecta basada en la religión o las creencias, y que las alienten a desarrollar actividades de capacitación para los empleadores tanto públicos como privados”.
“ASEGURAR LA NO DISCRIMINACIÓN POR MOTIVOS RELIGIOSOS ES CRUCIAL”
La Asamblea advirtió que, aunque “la presencia de miembros de diferentes grupos religiosos o no religiosos puede causar problemas en el lugar de trabajo, la aplicación de normas neutrales, como las relativas a los códigos de vestimenta, las normas alimentarias, los días festivos o los reglamentos laborales, puede dar lugar a una discriminación indirecta de determinados grupos religiosos, aunque no sean objeto de una atención específica”.
LA RELIGIÓN ES UN ASPECTO ESENCIAL DE LA PROPIA IDENTIDAD
“Dado que muchas personas pasan gran parte de su vida diaria en el trabajo, es de crucial importancia garantizar la no discriminación de los empleados por motivos de su religión o sus creencias”, añade la resolución.
Según la Asamblea, los estados miembros deben “adoptar una legislación eficaz contra la discriminación que abarque la prohibición de la discriminación por motivos de religión o de creencias y establecer mecanismos de vigilancia apropiados para evaluar su implementación”.
“UNA OBLIGACIÓN PARA LOS ESTADOS MIEMBROS”
“La libertad de manifestar la propia religión o creencia se aplica también en el lugar de trabajo. La religión es un aspecto esencial de la propia identidad y la identidad religiosa abarca tanto la práctica religiosa como las creencias”, subraya.
Por eso, “los Estados miembros tienen la obligación de garantizar la no discriminación en el lugar de trabajo. La libertad de los empleados para practicar su religión o sus creencias sólo puede restringirse si las restricciones se ajustan a las leyes y normas de derechos humanos”, concluye.
EL CONSEJO DE EUROPA
El Consejo de Europa es el principal órgano de derechos humanos del continente europeo. Reúne a 47 estados miembros, 27 de los cuales son también miembros de la Unión Europea.
Es una organización internacional de ámbito regional destinada a promover, mediante la cooperación de los estados de Europa, la configuración de un espacio político y jurídico común en el continente, sustentado sobre los valores de la democracia, los derechos humanos y el Imperio de la ley.◄