(Agencias – Verdad y Vida).-
Finlandia, Hungría y Rumania se convirtieron en un paraíso para los zoófilos, ya que tener sexo con animales es legal e inclusive existen burdeles con algunas especies como hembras de orangután a las que preparan y maquillan para prostituirlas.
El bestialismo, es el término usado para referirse a la práctica de relaciones sexuales con animales, algo que está prohibido en casi todo el resto de Europa, como es el caso de Dinamarca, que el año pasado lo hizo oficial, ya que a juicio de las autoridades estaba «dañando la imagen del país», señaló el secretario de Estado, Dan Jorgensen.
Con esta decisión se puso fin a una «laguna legal» que existía en materia de zoofilia en las leyes que regulan el bienestar y el cuidado animal. Jorgensen detalló que la medida «constituye un ataque hacia el animal, dado que se trata de sexo no consentido».
Naciones como Francia, Bélgica, Holanda y Alemania también han declarado ilegal el sexo con animales en la última década. Ángela Merkel, canciller de Alemania, introdujo en 2012 la norma contra el sexo con animales, señalando que estos últimos no debían usarse «para actividades personales sexuales o estar disponibles para actividades sexuales de terceros… así como forzarlos a comportarse de modos que son inadecuados para sus especies».
Por su parte, el Tribunal Supremo de Canadá autorizó las relaciones sexuales con animales siempre y cuando no conlleve penetración, decisión que ha levantado las críticas de asociaciones que luchan por la defensa de sus derechos. «Las leyes canadienses dan a los agresores de animales la licencia para utilizarlos para su propia satisfacción sexual», lamentó Camille Labchuk, perteneciente a una asociación en defensa de sus derechos.
¿Qué dice Dios al respecto?
La Palabra de Dios establece en Levítico 18:23-24, «Un hombre no debe contaminarse a sí mismo al tener sexo con un animal. Tampoco una mujer se ofrecerá a un animal macho a fin de tener relaciones sexuales. Eso es un acto perverso. No se contaminen con ninguna de estas prácticas, porque los pueblos que estoy expulsando delante de ustedes se contaminaron haciendo todas esas prácticas» (NTV).
A pesar de que Dios le dio al hombre libre albedrío, tener relaciones sexuales con animales es abominación ante Él. Es preciso reflexionar en lo que dice la Biblia en 1ª Corintios 6:13b, «… el cuerpo no es para la inmoralidad sexual, sino para el Señor, y el Señor es para el cuerpo».◄