(Verdad y Vida – Redacción).-
El apóstol Ignacio Yllaramendy, precursor de grandes eventos de oración en Venezuela, está completamente convencido de que la oración es “insustituible en la vida del cristiano, con ella podemos traer, del mundo sobrenatural al natural, los diseños y planes de Dios. La oración es más que una herramienta evangélica, más que la oxigenación del creyente, es la chispa que enciende los motores de la visión de Dios sobre su Iglesia, por lo que creo que tiene un poder indetenible, la iglesia local que ora, tiene el poder de disipar las tinieblas de su entorno, su comunidad, pero la Iglesia del Señor unida, que ora en el poder del acuerdo, de la unidad -como un solo cuerpo-, puede desplazar las tinieblas de toda una nación, levantar muros de contención, poner freno a la maldad, destruir los planes del enemigo y establecer el reino de Dios”, explicó.¿Qué los motivó a realizar eventos de oración en Venezuela?
– Recuerdo que, en el 2007, vivíamos un contexto muy particular en Venezuela y Dios nos levanta para convocar a su pueblo a cubrir al país en oración, esto suponía reunirnos en un lugar público grande que albergara a las diferentes congregaciones de la ciudad. Fue así como nacen las “Grandes Vigilias de Oración Todos Unidos por Venezuela”, para interceder bajo un mismo programa de oración, por 10 horas continuas, dejando a un lado las diferencias a fin de unirnos en un punto común: ¡Venezuela! Además, fuimos inspirados por las impactantes experiencias de transformación de ciudades como Cali (Colombia), Almolonga (Guatemala), Fiji y Uganda (África), donde miles de creyentes de diferentes denominaciones, hicieron los mismo y tomaron grandes lugares públicos para orar masivamente, humillarse ante Dios, adorarle y buscar su rostro intensamente. Hasta la fecha hemos realizado 14 Grandes Vigilias que han arropado los 24 estados y más de 48 ciudades del país de manera simultánea.
Explicó cómo en el año 2013 se formalizó este mover de unidad con el nacimiento del “Movimiento de Unidad Cristiana Bajo la Unción de Cuerpo” (Moviuc), para levantar mediante enunciados precisos, y de vanguardia, una conciencia de unidad en la Iglesia de Venezuela y el mundo, “derribando barreras denominacionales, motivando la valoración y el reconocimiento mutuo, y la interconexión entre todos los ministerios del país”.
“El Moviuc pone a disposición de la Iglesia un portal que sirve de plataforma para interconectar las diferentes iniciativas y ministerios que manifiesten la gloria de Dios, y a la vez demuestren un compromiso firme de trabajar bajo un código de ética y de unidad, el cual funciona a través de la página web www.movimientodeunidadcristiana.com, donde podrán enlazarse directamente unos a otros, uniendo sus fuerzas y recursos para bendecir a las naciones ‘Bajo la unción de cuerpo’”, dijo Yllaramendy.
En su ministerio, la oración es clave, ya que “todo lo que hasta ahora el Señor nos ha permitido hacer e impulsar, como los ayunos nacionales, la Gran Vigilia, el Moviuc, el Plan nacional de oración y otros, han sido diseños que Dios nos ha dado en momentos profundos de oración. Cuando somos ministros de oración nos volvemos confiables para Dios y es cuando Él puede, en su infinita misericordia, depositar en estas vasijas, sus planes. El trabajo ministerial que hasta ahora hemos desarrollado, por la gracia de Dios, ha sido generado en la oración y la unidad de la iglesia”, afirmó el pastor.
De igual manera, reconoció que desde hace varios años “venimos peleando una aguerrida batalla para desmantelar el principado de división, que en gran manera nos mantuvo separados dividiendo nuestras fuerzas, potenciales y, sobre todo, nuestra comunión. Pero ahora se sienten fuertes vientos de cambio, la división está cayendo, y una conciencia de unidad ha llegado a nosotros, ya estamos compartiendo juntos grandes retos de Dios, uno de ellos es la Campaña Nacional “No matarás”, que busca sembrar conciencia y valores cristianos en la nación en contra de la violencia”.
Respondiendo al llamado de unidad que el Señor ha hecho constantemente a la Iglesia venezolana, ¿cree que la oración tenga alguna influencia para llegar a la unión de las iglesias, pastores y líderes?
– Sin duda alguna, la oración es el escenario imparcial donde podemos lograr el acuerdo; ella crea la atmósfera idónea donde el Espíritu Santo puede convencernos y establecer una conciencia de unidad para derramar su poder, como en Pentecostés, cuando estaban todos unánimes en ruego y oración. De hecho, en el Decreto Espiritual que Dios nos dio para Venezuela, de los nueve artículos que empleamos como herramienta para interceder, cerramos con una rogativa común que es lograr la unidad de la Iglesia de Jesucristo en Venezuela y ya hemos visto muchos avances en esta materia.
¿Qué se necesitaría hacer para que haya un solo movimiento de oración nacional, cree que sea posible llegar a un acuerdo para orar?
– Solo se necesita la disposición del corazón y el compromiso con Dios. Hace 2 años comenzamos con las casas de oración, lo que llamamos el ‘Plan Nacional de Oración’, donde se establecieron casas de oración en ciudades como Acarigua, San Felipe, Puerto Ayacucho, Valles del Tuy y Caracas. El lanzamiento oficial se realizó el 26 de febrero de 2014, impartido por Gedeón Kim, misionero de origen coreano con cuatro años residenciado en la región amazónica de Venezuela, quien aportó de la exitosa experiencia de Corea, donde la intercesión continua en unidad hizo la diferencia en este país asiático. Este plan busca lograr 12 horas continuas, 5 días de la semana, tomando cada pastor y equipo de intercesores la responsabilidad de interceder una hora a la semana, y establecer un lugar fijo por ciudad, donde todos puedan llegar y tomar su turno. Creemos que es posible lograrlo, aunque sabemos que en estas labores, casi siempre es un pequeño grupo de hombres y mujeres de fe y pasión por Jesús, quienes toman la carga y llevan adelante visiones como estas de forma permanente.
Finalizó diciendo que “una iglesia que no ora, o que no le da la suficiente importancia a la oración, es una iglesia sin propósito, sin vida del Espíritu; pues como sabemos: la oración es el pulmón espiritual de todo ministerio, se corre el riesgo de llenar nuestras agendas de activismo religioso, rutinario y caminar sin visión fresca del cielo, cambiando la vida del Espíritu y revelación de la Palabra por actividades y eventos”.
Ignacio Yllaramendy
El apóstol Ignacio fundó la iglesia Maranatha, Movimiento de unidad en Caracas, Venezuela, hace 14 años. Se ha desempeñado como productor de televisión con programas de alcance nacional e internacional como “Tu cita con Dios” y “La vida que enriquece”. Es fundador y precursor de MOVIUC y la Gran Vigilia de Oración. Está casado con Soraya Romero y tienen dos hijos: Daniel Moisés y Rebeca, todos al servicio del Señor.
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