Verdad y Vida EL QUINCENARIO CRISTIANO DE VENEZUELA
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(Verdad y Vida – REDACCIÓN).-
En un comunicado de prensa, el rvdo. Jorge Raschke, ministro ordenado de las Asambleas de Dios y presidente del Ministerio Clamor a Dios y de la emisora 89.3 FM en San Juan, Puerto Rico, hizo un llamado de atención al gobernador Alejandro García; al presidente del Senado, Eduardo Bhatia; y a los senadores Ramón Nieves y María Teresa González, de ese país, para que actúen en favor de Puerto Rico y de su gente.
El escrito, que tiene por título «¡Basta ya!», está enfocado en el cese de diferentes situaciones que ocurren en ese país: «Basta ya de cargar al pueblo con impuestos, llevando a los pobres a la desesperación. Basta ya de abusar de los trabajadores, como la policía, empleados públicos y nuestros maestros del sistema de educación del país. Basta de destruir las esperanzas, al querer afectar el retiro justo para cada uno de ellos».
De igual manera, establece el comunicado que la enseñanza de los valores, moral y principios del cristianismo es responsabilidad de los padres o tutores y no de las escuelas. Esto en función de la llamada «perspectiva de género» que «está pervirtiendo a nuestros niños» porque permite que parejas del mismo sexo adopten niños y así «destruir el futuro» de la familia conforme al plan de Dios. Esta iniciativa quieren implementarla en todas las escuelas y así «destrozar la autoridad de los padres… La escuela tiene que enfocarse en las materias por las cuales nuestros hijos van a aprender, matemáticas, ciencias, historia, español, inglés… todo lo que tenga que ver a la enseñanza de género nos corresponde a los padres o tutores», expresó.
Continúa exhortando a que no se obligue a la minoría de senadores de diferentes partidos defensores de la moral y de la familia, a que hagan silencio, pues «mientras más se alejan de la moral, la justicia y de Dios nuestro pueblo, más expuestos estamos a situaciones lamentables para nuestra isla. El Salmo 33:12 expresa: «Bienaventurada la nación cuyo Dios es Jehová, el pueblo que Él escogió como heredad para sí». Sólo un arrepentimiento nacional, como el que ocurrió en Nínive podrá salvarnos del desastre que se nos avecina, y a su vez ese arrepentimiento traerá prosperidad a nuestro país», concluyó el reverendo Raschke.
