“Nadie está más vacío que aquel que está totalmente lleno de sí mismo”
La verdad es que hoy somos la suma de todos ellos, gente que nos amó, fue paciente y le añadió mucho valor a nuestra vida.
No llegaste hasta aquí solo, mucha gente te ayudó, quizás hoy ni los recuerdas, pero yo te invito a hacerlo, sé agradecido, llámalos, envíales un mensaje y agradéceles por todo lo que un día hicieron por ti, y lo más importante, ahora es tiempo de que hagas lo mismo por otras personas que necesitan tu ayuda, da de pura gracia lo que un día te dieron de gracia a ti.
Ser agradecido te mantendrá las puertas abierta en la vida para seguir creciendo como persona, ser egoísta es la mejor forma de empezar a perder todo lo que has logrado hasta hoy.
El grande engrandece la vida de otros.
El próspero ayuda a otros a prosperar.
El bendecido bendice la vida de otros.
La mejor forma de ver cuánto has crecido es cuando ves cómo ayudas a otros a crecer.
Si piensas que el mundo está en deuda contigo y que los demás tienen la obligación de ayudarte y que tu mayor logro es servirte de otros y tomar ventaja de todo y de todos, en lugar de pensar que existes para ayudar a otros, es porque estás demasiado lleno de ti mismo, tanto, que no has crecido casi nada en la vida, sin importar la edad que tengas o el estatus social que poseas; realmente eres una pequeña persona que nada trajo a este mundo, que ignora por completo que no se podrá llevar nada cuando muera.
Solo quien es humilde, vive agradecido y dedica su vida a servir a otros demuestra su grandeza, lo demás es vivir con un inmenso vacío hasta dejar de existir y pasar al olvido en la historia.
Miguel Ángel León R.
Apóstol y sicólogo