¿Estás orando por tu pastor? ¿Te preocupas por él? ¿Le escribes mensajes de vez en cuando con versículos bíblicos para animarle en su sagrada tarea? ¿Estás siendo un apoyo para su vida o un estorbo?

Muy buenas. Te saluda el Pastor Will Graham.
¿Sabías que…?
En los EEUU, 1.500 pastores se dan de baja del ministerio por mes (no por año, ¡POR MES!)
El pastor promedio solamente sirve a su congregación durante tres años (y luego se va).
¿Por qué?
Según The Lutheran Church Missouri-Synod (la denominación luterana evangélica más grande en los EEUU), un 80 % de sus pastores se da de baja a causa de miembros conflictivos y chismosos que siembran división y murmuración en el cuerpo hablando mal, principalmente, del pastor, de su familia y de los demás líderes en la congregación.
Se ve que, en la mayoría de las congregaciones, hay personas concretas (muchas veces con pretensiones de poder) que se entregan incansablemente a la tarea de informarle al pastor de todo lo malo que los miembros (y ex miembros) de la iglesia están diciendo sobre él con el fin de minar su ánimo, fuerzas y gozo.
Kevin Miller, autor de un libro sobre el desánimo en el ministerio, cita cinco razones fundamentales por las cuales los pastores se marchan de las iglesias:
1) No ven fruto;
2) No pueden dedicarse a la Palabra de Dios y la oración porque hay tantas otras necesidades que tienen que ser atendidas;
3) La existencia de miembros maliciosos y problemáticos;
4) La falta de palabras de ánimo de parte de la congregación para seguir adelante/ la falta de sentirse respaldado por la iglesia; y
5) La falta de descanso.
Queridos hermanos:
Si tienes un pastor fiel en el púlpito de tu congregación local, ¡ALABA a Dios! ¡Ora mucho por tu pastor! ¡Defiende su honra!
Recuerda que tu pastor es un creyente. Sí, tiene un llamamiento distinto al tuyo; pero sigue siendo un creyente.
¿Estás orando por tu pastor? ¿Te preocupas por él? ¿Le escribes mensajes de vez en cuando con versículos bíblicos para animarle en su sagrada tarea? ¿Estás siendo un apoyo para su vida o un estorbo?
Si yo llamara a tu pastor esta tarde y le preguntara si él se siente arropado por ti, ¿qué me diría?
Dios nos ayude a todos a HONRAR A NUESTROS PASTORES para la gloria de Dios y la edificación de su preciosa grey. Los obreros son tan pocos. Y los obreros fieles aún menos…
No seamos ingratos. Demos las gracias a Dios por nuestros pastores. Dejemos de prestar atención a tantos chismes. ¿Cuántos creyentes no habrán oído a gente difamado a su pastor? Muy pocos (tristemente).
Una tarea práctica: ¿por qué no tomas un momento de tu tiempo ahora para orar por tu pastor, su familia y su ministerio?
Cultivemos una cultura de gratitud.