(Verdad y Vida – REDACCIÓN).-
A raíz los recientes acontecimientos donde se ve a reconocidos líderes del cristianismo aceptar y perseguir un camino de «unidad» con la Iglesia Católica, es necesario entender que todo lo establecido por las Sagradas Escrituras se cumple a la perfección y que ante tal situación la Iglesia de Cristo en el mundo entero debe intensificar sus oraciones para pedir misericordia al Dios Soberano.
En este sentido, Verdad y Vida entrevistó al escritor, comunicador y ministro de Cristo, Serafín Contreras Galeano, quien expresó su punto de vista ante este tema ya descrito en la Biblia.
Desde su perspectiva como líder que Dios usa predicando santidad, señalando las desviaciones de la Palabra de Dios y restaurando a los caídos, ¿qué le parece las adhesiones, mediante acuerdos de hombres, que han hecho algunos reconocidos líderes de Occidente con la iglesia católica, en la persona del Papa Francisco?
– Cuando el anterior Papa renunció, la emisora La Voz de Miami, EE.UU, me hizo una entrevista y una de las preguntas que me hicieron fue que a quién creía yo que se nombraría como Papa de la Iglesia Católica. Respondí, «estoy casi seguro que será un africano, o un asiático o un latinoamericano y la razón es porque en estas tres regiones está creciendo asombrosamente la Iglesia Evangélica. La Iglesia Católica está en un proceso de detener el crecimiento evangélico. Sabemos que ya están conscientes que la mejor manera es tratar de penetrar la Iglesia Evangélica a través de algunos líderes. El deterioro del liderazgo cristiano ha servido como grieta para tal penetración.
¿Tiene esto que ver con la apostasía de los tiempos del fin de la que escriben las cartas apostólicas, las cuales se relacionan con la iglesia de Laodicea de Apocalipsis 3?
– Sin duda que sí. Cuando se sacrifican los principios eternos por lograr un acomodamiento en nuestro entorno empezamos a caminar en un terreno minado que ya ha sido descrito por las mismas Sagradas Escrituras. Recordemos que Apocalipsis habla no sólo del anticristo, sino de una estructura religiosa que se adapta camaleónicamente con la política. Ya lo estamos viendo en varios países del mundo donde vemos a líderes cristianos compartiendo la mesa con políticos que están claramente comprometidos con sectas y grupos que no tienen nada que demostrar de una genuina espiritualidad.
Acotó Contreras que estas decisiones personales o de organizaciones no podrían afectar a la «Iglesia real, genuina, que mantiene sus principios y que ama al Señor», pero que a la «Iglesia Estructural sí».
Agregó que «estamos viviendo tiempo de grandes decisiones. Los genuinos creyentes y los líderes reales tendremos que tomar profundas decisiones y Dios nos respaldará. La persecución que viene en los próximos años no será por ser simplemente un cristiano o un creyente o por asistir a una iglesia, sino por mantenernos firmes en los principios divinos a riesgo de nuestra propia vida. Pero, cuando lo que parece oculto entre algunos líderes salga a la luz, nosotros levantaremos nuestra cabeza, porque nuestra ‘redención está cerca’. No hablo de redención de salvación porque ya estamos redimidos, sino de redención de este ambiente y sistema moribundo».
También dejó en claro que esta unidad o ecumenismo allanará el terreno para el levantamiento del «falso profeta» y de «Babilonia la ramera» pues «es el destino final. Todo lo descrito en Apocalipsis lo declara. Recordemos que en Apocalipsis vemos tres elementos bien delineados para el último tiempo y estos tres elementos tienen que unirse para dar paso al «nuevo orden mundial». Estos tres elementos son: Política, Comercio o Finanzas y Religión».
¿Qué consejo pudiera darle al liderazgo para que vele y no caiga en la trampa satánica de este ecumenismo mundial?
– Una cosa es estar abierto a la gente que tiene hambre de Dios y están aún siendo fieles a su religión, para ellos nuestro amor debe ser inquebrantable y nuestro anhelo de amarlos antes de convertirlos. Otra cosa es comprometernos con un liderazgo religioso que no ha dado ninguna muestra de genuina y total conversión. En este sentido mi palabra de advertencia al liderazgo es que para poder velar no podemos perder el discernimiento que el Espíritu Santo nos da. Los movimientos que vienen sólo se podrán detectar con el discernimiento espiritual. La misma Biblia habla de que aún muchos escogidos serán engañados.
¿Cree usted, como nosotros en Verdad y Vida, que llegó la hora de unir fuerzas y levantar a los ministerios de sana doctrina en una cruzada por mantener la pureza de las Sagradas Escrituras y contrarrestar estas nuevas corrientes lideradas por hombres que se han alejado de los principios bíblicos?
– Por lo menos no cerrar nuestras bocas y denunciar la mentira y el engaño. Pero pensar en cruzadas o eventos no me llaman mucho la atención porque creo que nuestro papel debe ser el mismo que demostró nuestro Señor en su humilde presencia acá en la tierra. El reino de los cielos sufre violencia y sólo los violentos lo arrebatan y esa violencia no es la de armas, ni de cruzadas ni de eventos o conferencias, sino la misma violencia de una semilla que es tan violenta pero silenciosa que es capaz de generar vida y producir un árbol que es capaz de levantar el concreto de una acera, o la violencia de un niño al momento de nacer capaz de abrirse paso desde el útero entre sangre y agua.
Creo que nuestro trabajo tiene que ser con los líderes emergentes, invertirnos en ellos, levantar una generación de líderes jóvenes que sepan cómo responder a este ambiente con pureza y pasión. Lo que Jesús hizo no parecía relevante pero lo fue, en su tiempo explotó y creo que esa historia se repetirá y Jesús lo hará otra vez a través de líderes que no jueguen ya entre dos aguas sino que tomen la decisión a sangre y fuego.
Para finalizar, Serafín Contreras comentó que «los mejores días están por delante pero no en un ambiente cómodo y reposado, sino en un ambiente revuelto, estresante y demandante. Creo que se han acabado los días proclamados por muchos desde los púlpitos con «profecías modernas» de paz y tranquilidad, prosperidad y riqueza. Dios está ya levantando los Isaías, los Jeremías, los Oseas que no temerán ser lanzados a las cisternas por atreverse a decir lo que Dios quiere que se diga».
Los Nazareos
Contreras Galeano citó de su libro “Líderes de Papel con Pies de Barro”, acerca de los Nazareos:
Los nazareos pasan mucho tiempo solos por dos razones: una, porque la mayoría de la gente no quiere estar con ellos porque le ponen agua a la fiesta; y otra, porque ellos aman estar cerca de Dios y sólo con la gente a quienes Dios los lleva a compartir.
Los nazareos no aman los eventos, sino los momentos; no buscan publicidad, sino intimidad. No buscan los jardines ni los parques, sino que aman los desiertos donde la tierra seca y resquebrajada anhela ver un día flores.
Los nazareos son predecesores, proclaman lo que viene, y desaparecen para no eclipsar al Sol de Justicia.
No se promueven a sí mismos, sino que exaltan al Maestro y Señor de la Iglesia. «… pero viene uno más poderoso que yo, de quien no soy digno de desatar la correa de su calzado» (Lucas 3:16).
Los nazareos parecen pequeños e insignificantes a los ojos de los hombres o de las estructuras religiosas, pero grandes a los ojos de Dios.
Los nazareos no proclaman prosperidad sino reclaman santidad, porque la santidad tiene su raíz en el corazón, mientras que la prosperidad la tiene en la mente, la vanidad y la cartera.
Los nazareos confrontan el pecado a cualquier nivel sin mirar el precio tan alto que terminan pagando.