Triunfar es la palabra que hoy debes esculpir en tu mente. Muchos caen derrotados por las circunstancias, y hasta se acostumbran a fracasar

El autor Armando José Sequera cuenta lo siguiente en su libro El jardín de las anécdotas. Cuando Simón Bolívar se hallaba en Pativilca a mediados de febrero de 1824, recibió la visita del escritor y estadista colombiano Joaquín Mosquera. Bolívar se hallaba sentado en una pobre silla, recostado contra la pared de un huerto y tenía un pañuelo atado a su cabeza. Sus pantalones dejaban ver sus rodillas y su voz era hueca y débil y su semblante cadavérico. Entonces Mosquera le preguntó: ¿Qué piensa hacer usted ahora general? El Libertador abrió los ojos enteramente y su rostro se iluminó. Entonces dijo sin titubear: ¡Triunfar! Y lo hizo. Seis meses después, en agosto, triunfó en Junín y en diciembre repitió esa victoria en Ayacucho.
Amigo mío, triunfar es la palabra que hoy debes esculpir en tu mente. Muchos caen derrotados por las circunstancias, y hasta se acostumbran a fracasar. Triunfamos cuando nuestro objetivo es noble, justo y bueno; cuando somos perseverantes, cuando tenemos fe en Dios. Y en definitiva esta es la mejor victoria.
Eduardo Padrón
Pastor, comunicador y escritor
edupadron@gmail.com