(Juan C. Álvarez/ VyV – MARA).-
La Fundación Ministerio Cristiano de la Mujer (MISCRIM), realiza cada año una convocatoria denominada: «El Clamor de las Madres», en el municipio Mara del estado Zulia, bajo la Palabra de Dios que dice: «Convoca a las madres para que clamen en la plaza mayor por los hijos de la ciudad. Y, yo desde el cielo oiré y haré» (Lucas 1:17; Isaías 29: 23).
La información la dio a conocer, Carmen Paz, presidenta de MISCRIM, quien resaltó que el propósito de esta actividad anual es anunciar la revelación del diseño de Dios para las familias del municipio Mara.
Esta fundación fue creada en el año 2008, y nace porque es la visión de Dios levantar una voz profética y apostólica para la mujer de Mara; porque está en el corazón de Dios. «Nuestro propósito es traer unidad a las mujeres cristianas de Mara y ayudarlas a formarse y levantarse en el ministerio que Dios le ha dado a cada una de ellas. Cabe destacar que la mujer de Mara juega un papel muy importante en este municipio, ya que Mara es una plataforma profética al último gran avivamiento», precisó la pastora Carmen Paz.
Asimismo, señaló Paz que hasta ahora MISCRIM ha venido trabajando con las mujeres de las iglesias de las diversas parroquias de este municipio, «y también contamos con el apoyo de las pastoras Jeidy de González, Doris Morales, Heddys de Bravo, Luisa Romero, Alisol Romero, Zandra Araujo y el apoyo incondicional de las mujeres valiosas del pueblo de Dios».
La pastora Carmen Paz, destacó que «hemos venido realizando desde el 2008 congresos apostólicos y proféticos para la mujer, visitas a la cárcel de mujeres, jornadas médicos-odontológicas en el sector Flor de Mara para la tercera edad y cerramos el año pasado con el Clamor por los Hijos de Nuestra Ciudad, ‘yo desde el cielo oiré y haré’, una orden de Dios para contrarrestar y ponerle fin a la situación que estamos sufriendo madres e hijos de esta ciudad».
Decretos sobre los hijos de nuestra ciudad
Que las vidas de nuestros hijos sean consagradas a Dios, preservadas en Él y que alcancen el propósito para el cual fueron creados, que se cambiará toda situación en sus vidas que deshonren el Nombre de Dios por conductas que dignifiquen sus vidas y exalten el Nombre del Señor Jesucristo.
Que todo plan de hechicería, espiritismo, brujería, pactos y maldiciones generacionales y todo conjuro demoníaco sean destruidos, demolidos, anulados, revocados y cortados de los hijos de mi ciudad.
Que el único diseño que prevalece y aplica a nuestros hijos y a los hijos de nuestros hijos sea el diseño y el destino profético de Dios para ellos.
Que ninguna arma forjada por los hombres que no temen a Dios, ni estrategia del enemigo prosperará en contra de nuestra descendencia; que la vida y destino ministerial, moral y espiritual de nuestra generación sea un sí y un amén en Cristo Jesús.
Que nuestros hijos y nietos hasta la tercera y cuarta y generación heredarán las naciones conformen a las promesas establecidas en las Sagradas Escrituras. Que mis hijos caminen en libertad, que desarrollen cualidades, virtudes y valores de amor, tolerancia, respeto, perdón, obediencia y sumisión al Eterno.
Que las riquezas espirituales y terrenales, los tesoros financieros y la prosperidad que viene de la mano del todopoderoso rodean y alcancen a nuestros hijos, siendo bendecidos para bendecir.
Que nuestros hijos caminen con cielos abiertos viendo cada día la gloria de Dios y su presencia; abriendo caminos, derribando cerrojos y haciendo prosperar todo lo que emprendan con sus manos.