Verdad y Vida EL QUINCENARIO CRISTIANO DE VENEZUELA
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(Verdad y Vida – REDACCIÓN).-
El pasado 13 de febrero, el Consejo Evangélico de Venezuela (CEV) realizó un pronunciamiento oficial ante la situación actual del país, a raíz de los hechos del 12 de febrero en Caracas y varias ciudades de Venezuela.
El comunicado, firmado por el reverendo José G. Piñero, 1er vicepresidente de la Junta Directiva del CEV, establece lo siguiente:
“En esta hora de extraordinario dolor para el país, en que el luto embarga una vez más los hogares venezolanos, el Consejo Evangélico de Venezuela manifiesta su solidaridad a todos y eleva oraciones y súplicas a Dios por la paz de nuestra nación, y especialmente por las familias que han perdido a un ser querido durante las protestas realizadas el pasado miércoles 12 de febrero.
Recordamos también en nuestras oraciones a cada hogar que a diario queda enlutado debido a la desbordante acción de la delincuencia que impunemente actúa a lo largo y ancho de nuestra geografía.
Como Institución que promueve la fe y caridad cristiana, así como los valores democráticos, el Consejo Evangélico de Venezuela se pronuncia en pro de los derechos civiles y su libre ejercicio dentro del marco constitucional. Por tanto afirmamos el derecho a la vida, a estar informados, y al mismo tiempo repudiamos el uso de la violencia en cualquier escenario, incluyendo en ello la posesión y uso ilegal de armas que terminan siendo usadas contra la ciudadanía, así como el desconocimiento o la desnaturalización de los derechos antes mencionados.
Pedimos a los órganos del Estado el mejor esfuerzo por resguardar la seguridad e integridad física de los ciudadanos como debe ser la vocación natural de los Estados que se comprometen con la promoción de los derechos humanos, nos solidarizamos con los familiares que viven la angustia por causa de los suyos que se encuentran privados de libertad, e invitamos a cada venezolano a ejercer sus derechos en el marco de la Constitución Nacional.
Finalmente hacemos extensiva a todos la invitación a unirnos en la oración por la paz y bienestar de nuestra nación, en el mismo espíritu en que la Biblia nos cuenta que actuó el profeta Nehemías quien cuando fue enterado de la tragedia de su pueblo dijo: “Cuando oí estas palabras me senté y lloré, e hice duelo por algunos días, y ayuné y oré delante del Dios de los cielos”. (Nehemías 1:4). Familia venezolana busquemos el rostro de Dios en oración. Dios bendiga a Venezuela”.
