Verdad y Vida EL QUINCENARIO CRISTIANO DE VENEZUELA
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(Edgar Daniel Figueroa – Productor musical).-
«Tu aumentarás mis fuerzas como las del Búfalo» (Salmo 92:10).
He estado analizando este versículo detalladamente, y decidí buscar información sobre este potente animal llamado BÚFALO.
Algunos recordamos esa canción de Jesús Adrián Romero (como búfalo, como búfalo, arrollaré al enemigo si se enfrenta conmigo tengo fuerzas del Señor, COMO BÚFALO); bueno cuando esa canción salió yo creo que apenas tenía unos 13 ó 14 años. La cantaba y ni sabía qué era un búfalo, a lo mejor una vaca o toro o algo así pensaba yo. Ahora que vuelvo a leer este versículo me entra curiosidad por saber más de este animal. ¿Qué es lo que el rey David intentaba decir cuando menciona fuerzas como un búfalo?
En el suroeste asiático el búfalo es conocido como «el tractor de oriente», debido a la utilización de su fuerza para el trabajo pesado en las tierras. Un búfalo puede llevar cargas hasta un poco más de 2.866 libras, sin duda tiene una fuerza tremenda. Es decir, que este animal tiene la capacidad de cargar casi 30 sacos de 100 lbs de café en grano
Es impresionante la capacidad del búfalo y no digamos su estructura, puede llegar a pesar más de 1.200 kg, la verdad que algo increíble. A pesar de su tamaño monstruoso, de su fuerza y potencia aplastante, este animal es capaz de correr hasta 60 kilómetros por hora. Y por si eso fuera poco, en la base de su cabeza, los cuernos son muy anchos y lisos, casi se encuentran en el centro de la frente y forman un casco duro, que las balas no pueden perforar, y protegen la cabeza del animal de las garras y dientes de otros. ¡Qué gran animal que hasta su propio chaleco antibalas tiene en la cabeza!
Ahora podremos entender mejor este versículo de la Biblia? Sin duda alguna el rey David sabía de qué animal estaba hablando cuando escribió es versículo. Pero ¿por qué a veces seguimos sintiéndonos débiles? ¿Por qué luchamos para entender y creer lo que Dios nos dice en su Palabra? Yo mismo he luchado, he tenido que entender que es sólo por fe que podemos ser fuertes como el búfalo, por fe creemos su Palabra y por fe creemos que Él nos fortalece como un búfalo. Pero sólo tenemos que creer, creer, creer, creer, creer, suena fácil pero a veces es difícil para muchos de nosotros.
Pero intentemos creer en su Palabra sintámonos como un búfalo, como un potente animal de carga, porque si Dios lo ha dicho en su Palabra es porque Él lo hace. Sólo tenemos que creer, su Palabra dice que si podemos creer y tener fe como un granito pequeñito de mostaza (que por cierto es uno de los granos más pequeños en la faz de la tierra) y diríamos a esa montaña quítate y échate al fondo del mar, ELLA SE QUITARÍA y no habría nada IMPOSIBLE para nosotros.
Pero ojo, todo está en creer y hablarle a esa montaña, Jesús dijo: «SI LE DIJERES A ESA MONTAÑA», no dijo si lo pensaras o si lo soñaras o si sólo lo creyeres en tu mente… Claramente nos dice que tenemos que hablar, decirlo con nuestra propia boca. Así que dile a tu montaña sea lo que sea: ¡QUÍTATE Y ÉCHATE AL FONDO DEL MAR!
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