Durante esta Semana Santa, más de 110 mil jóvenes se dieron cita en el Parque Recreacional Sur de Valencia, en el estado Carabobo, para participar en la tercera edición del Congreso Nacional de Jóvenes, celebrado los días 2, 3 y 4 de abril, bajo el lema: «La Revolución de Jesús».
Jóvenes provenientes de distintos estados de Venezuela y de otras naciones del mundo acudieron a esta actividad convocada por el Pastor Javier Bertucci, director nacional de «El Evangelio Cambia», con el propósito de impulsar cambios genuinos en la juventud, a través de actividades y mensajes que promueven valores y principios cristianos, a fin de que cada joven se convierta en protagonista de las transformaciones positivas y profundas que requiere la sociedad de cada país.
Durante estos tres días, los asistentes disfrutaron de producciones audiovisuales y puestas en escena que dieron vida a obras teatrales y musicales que reflejaron la pasión, muerte y resurrección de Jesús. Asimismo, la agrupación musical JEF interpretó en vivo su nueva producción discográfica «La Revolución de Jesús» y realizó el lanzamiento oficial de este álbum.
Cabe resaltar que durante este congreso se auspició con hospedaje, transporte y alimentación gratuitos para 15 mil jóvenes participantes; este beneficio será extensivo para el Congreso Nacional de Jóvenes del próximo año, que tendrá como lema: «Jesús no me Condena», que se realizará durante la temporada de Semana Santa 2016.
La actividad también impactó las redes sociales Facebook, Instagram y Twitter, siendo tendencia en Venezuela con la etiqueta «Jesús no me Condena» en esta plataforma. De esta manera, se posicionó en el primer lugar de las etiquetas más mencionados en las redes sociales.
Actuaciones, coreografías, majestuosos vestuarios, recursos multimedia, festival de artes, parque temático y muchas otras sorpresas, fueron parte de este congreso de jóvenes, que en esta edición logró reunir a cientos de miles de jóvenes que vivieron días inolvidables, con un mensaje que demostró que Jesús, no es religión, no es historia, ¡Él es la vida!