«Recuerda, por tanto, de dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré pronto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido» (Apocalipsis 2:5).Cuando el Señor habla sobre recuperar el primer amor, sencillamente dice: «Recuerda, por tanto, de dónde has caído». Esto quiere decir que es algo muy particular en cada uno, el primer amor de cada uno es diferente. Cada uno lo ha vivido y disfrutado en su propia intensidad, el Señor no nos pide cosas por encima de nuestras fuerzas. Solo nos dice: ámame como al principio, con ese fervor, esa dedicación, cuando yo ocupaba el centro de tu vida. Esto es más importante para el Señor que todo evangelismo o cualquier otro trabajo que hagamos para Él. Tengamos en cuenta que a muchos que le sirven y sanan y echan fuera demonios, un día el Señor les dirá: «nunca os conocí». Entendamos que la comunión lo es todo en la vida espiritual. ¡Dios te bendiga!
Fernando Regnault
Articulista
elabcdelabiblia@hotmail.com
Amén; Preciosa reflexión Dios le bendiga.