El predicador y expositor bíblico C. H. Spurgeon dedicó buena parte de su vida a completar su «opus magna», un macro-comentario al libro de los Salmos que tituló «El Tesoro de David». Su extraordinario valor radica en que Spurgeon no tan solo aporta en el mismo su propia exposición versículo por versículo de cada Salmo, sino que tuvo la paciencia de seleccionar, recopilar e incluir los mejores comentarios sobre cada versículo por los Padres de la Iglesia, reformadores y, de manera especial, los autores puritanos, hasta llegar a los comentaristas contemporáneos suyos. Cabe decir, pues, que en El Tesoro de David Spurgeon seleccionó bajo su criterio los mejores extractos de renombrados comentaristas sobre cada salmo desde el Siglo II hasta finales del Siglo XIX.
Samuel Vila, el fundador de CLIE, fiel admirador de C. H. Spurgeon y alumno de su escuela, emprendió en 1932 la magna tarea de traducirlo y hacerlo asequible en español. Pero la traducción fue completada por su hijo Eliseo tras la muerte de su padre.
La obra completa se ha estructurado en tres tomos de los cuales el primero contiene 60 Salmos clave (los más conocidos, leídos y predicados); el segundo el Salmo 119 con el resto de salmos hasta el 69 (que no se hayan publicado ya en la selección del primer tomo); y un tercer tomo con los restantes salmos hasta el 150.
El valor excepcional de la versión española son las notas explicativas a pie de página, añadidas por el traductor-adaptador, que aportan un valor adicional a cualquier edición en lengua inglesa. Amplían y aclaran muchos términos y conceptos propios de la época, acercando el texto al lector actual.
Editorial Clie