La respuesta al clamor realizado por la Iglesia venezolana está por llegar
“El alma generosa será prosperada; Y el que saciare, él también será saciado” (Proverbios 11:25 -RVR1960).
Siendo las cinco menos cuarto de la madrugada, desperté, teniendo vivas las imágenes de un sueño.
Vi al Libertador Simón Bolívar al frente de una embarcación; estaba cubierto con una capa color granate, tenía una herida en el hombro izquierdo. Detrás de él iban sentados varios soldados, este bote se dirigía hacia las costas de Venezuela.
Bolívar tenía la mirada fija hacia el país, y sonreía; aunque navegaba herido, estaba muy confiado. El mar Caribe acariciaba la embarcación, avanzaban por todo el frente del país.
Luego de esta imagen, pude ver cómo volvía la esperanza al pueblo venezolano; era como que por haber sembrado tanto bien a extranjeros que pisaron su suelo en el pasado, iniciaba una etapa de satisfacción.
Este ejército que llegó al norte de Venezuela hizo que los opresores huyeran con muchísimo miedo. Fue un sueño lleno de esperanza. Bolívar sonreía con una confianza plena, los soldados hacían silencio, estaban seguros de su victoria, al llegar a las costas.
La Biblia dice: “Porque en esperanza fuimos salvos; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo? Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos. Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles” (Romanos 8:24-26 -RVR1960).
La respuesta al clamor realizado por la Iglesia venezolana está por llegar. Recuerdo lo que está escrito en Éxodo 3:9: “El clamor, pues, de los hijos de Israel ha venido delante de mí, y también he visto la opresión con que los egipcios los oprimen” (RVR1960).
Esperamos lo que no vemos, y con paciencia lo aguardamos de la mano de Dios, sabemos que ocurrirá ante nuestra mirada.
Dios habló a su pueblo, el pueblo debe seguir levantando clamor. Los justificados veremos triunfar al verdadero LIBERTADOR.
Harold Paredes Olivo
Pastor y comunicador
labibliavivela@gmail.com