(Fuerza Latina/ VyV – KIEV).-
Casi siete mil personas han desaparecido tras los enfrentamientos entre Ucrania y Rusia, pese a los acuerdos de ‘Alto al fuego’ firmado en febrero entre las fuerzas ucranianas y los separatistas rusos.
La violación de este acuerdo se ha remarcado en las últimas semanas, cuando ambos bandos han declarado víctimas fatales. En medio de esta turbulencia, misioneros evangélicos, nativos de Ucrania, arriesgan sus vidas para llevar la ayuda vital a civiles y soldados que se encuentran en la línea de fuego.
Desde los combates que se iniciaron el año pasado en el Este de Ucrania, se estima que 1,4 millones de personas se han visto obligadas a huir de sus hogares. El hambre y la enfermedad cobraron la vida de muchos de los que huyeron de las balas y las bombas. Sin embargo líderes cristianos supervisan organizaciones que prestan ayuda a las personas que se encuentran en las zonas de conflicto.
«La gente buscó refugio en los sótanos de los edificios y de sus propias casas por temor a huir y morir en el intento», menciona uno de los voluntarios. «En los refugios no tenían comida ni agua, ni medicinas, ni calor durante el invierno y mucho menos instalaciones sanitarias», continuó.
Los indígenas misioneros de ‘Misión de Ayuda Cristiana’ (Christian Aid Mission) afirman que tienen el conocimiento y los contactos para superar los obstáculos de la guerra y hacer llegar la ayuda a las personas. «Cada semana enviamos paquetes de alimentos y ropa a diferentes localidades de las regiones de Donetsk y Lugansk donde las personas son incapaces de abandonar el territorio», dijo un director de ministerio local. Ayuda Cristiana ha establecido cocinas móviles en tiendas de campaña en las que se alimentan las personas.
Cada día, hasta mil personas reciben alimentos, dijo el director del ministerio. «Todas estas personas escuchan el testimonio de Jesucristo», afirmó. «Se les ofrece la oportunidad de repetir una oración de arrepentimiento. De acuerdo con los pastores, nadie se niega a arrepentirse», agregó.
Obreros cristianos locales de los ministerios indígenas han demostrado la capacidad de extender la ayuda en nombre de Cristo. Ucrania tiene una red de iglesias, ministerios y voluntarios en el lugar, todos trabajando juntos para proporcionar ayuda en situaciones críticas. Los voluntarios y trabajadores de la iglesia, trabajan juntos para restaurar edificios abandonados y albergar a las personas sin hogar». Desde que comenzó el conflicto militar, los ministerios con la asistencia de Christian Aid han ayudado a más de 10 mil personas, dijo el líder cristiano.