«Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, Que traigamos al corazón sabiduría» (Salmo 99:12).
Pensando en varios ministros amigos que en los últimos 5 años partieron para estar con el Señor Jesucristo y su traslado súbito a la dimensión de gloria. Comparto algunas ideas que brotaron de mi contemplación de lo acontecido, a partir de hoy recibo un nuevo mandamiento de Espíritu Santo:
«NO PROCRASTINARÁS».
Procrastinar es postergar, «lo hacemos después», «déjalo para mañana», «¡para después…!», es una actitud común en miles de personas hoy, y en los cristianos místicos siempre; dicen: «no es el tiempo, espera el tiempo». El síndrome de Marta, «si hubieras estado aquí…» (ayer), y luego se va al futuro «yo sé que resucitará en el día postrero», mientras Jesús le decía: «Hoy tu hermano resucitará», hoy cree, hoy quita la piedra, hoy actúa, hoy atrévete, no hay mañana sin el hoy, mañana será igual o peor que el hoy si no actúo, es necesario ser proactivo. Predicador no le digas a la gente que vienen días mejores si no los desafías a trabajar en el hoy en sus cambios. El pasado fue, el futuro no existe, es una idea, solo es creado por los que no procrastinan y actúan hoy. La mujer del flujo de sangre tenía 12 años esperando, el día que actuó y se atrevió cambió su presente y su futuro; vamos, atrévete. Tu fe funciona, hazlo ya. Sabemos cuánto tiempo hemos vivido mas no sabemos cuánto tiempo nos queda en esta dimensión terrenal. El problema no es la muerte, porque es una cita segura para todos; es cómo vivimos la vida y nuestro legado generacional. «Los días de nuestra edad son setenta años; y si en los más robustos son ochenta años, con todo, su fortaleza es molestia y trabajo, porque pronto pasan, y volamos» (Salmo 90:10).En la procura de tus objetivos, sueños y metas trazados hay que considerar algunos aspectos básicos para lograrlo:
Principios básicos
1. Define la visión.
2. Busca los mejores para tu equipo.
3. Traza un plan que descubra tus fortalezas y debilidades y trabaja en ello.
4. Ejecuta lo planeado evaluando y corrigiendo en la ejecución.
5. Evalúa lo realizado aprende de los errores y perfecciona tus aciertos.
Principios espirituales y emocionales
1. No mires atrás (mujer de Lot).
2. No te distraigas, elimina todo tipo de distracciones que roban tu tiempo sin retorno.
3. Persiste a pesar de la oposición que saca lo mejor de ti para que logres tus metas.
4. Recicla y capitaliza la crítica, muchas veces te dice dónde estás y hacia dónde debes ir.
5. Cuídate de tu peor enemigo, tú mismo, no te tengas lástima, vence el desánimo, no te dejes influenciar negativamente cuando otros persiguiendo los mismos objetivos fallaron, aprende de tus errores y de los errores de otros.
6. Sé humilde y busca mentores inteligentes y espirituales, adecuados a tus metas y proyectos, te acortan el camino y aceleran tu destino final.
7. No pierdas el origen y propósito de tu visión-misión, es cumplir con tu cuota generacional asignada por Dios y la historia.
8. Ten gratitud a Dios y a tu gente.
Luis Tovar
Apóstol
apostoltovarluis@hotmail.com