(Grupo Nelson).-
El autor cree que las buenas respuestas solamente vienen de hacer las preguntas apropiadas. A través de esta pregunta poderosa y provocativa: «¿Cómo matar a once millones de personas?». -El número de gente asesinada por el régimen nazi alemán entre 1933 y 1945-, explora otras preguntas relevantes para nuestras vidas de hoy en día:
¿Tiene importancia que a millones de ciudadanos de a pie se les haya apartado de participar en las decisiones que dan forma al futuro de nuestro país?
Y lo que es más peligroso: ¿son los políticos los que tienen ese propósito enfermizo, o ha sido una población demasiado confiada lo que ha permitido que gente así les lidere?
¿Cómo se supone que vamos a notar la diferencia entre los «chicos buenos» y los «chicos malos»?
¿De qué manera la respuesta a esta pregunta afecta no sólo a nuestro país sino a nuestras familias, nuestra fe y nuestros valores?
¿Qué ocurre en una sociedad donde la verdad está ausente?
Ya no podemos medir el valor de un líder por los criterios proporcionados por la izquierda o la derecha. En vez de eso, debemos utilizar un estándar invariable: la pura y desnuda verdad.