La Reforma del siglo XVI fue clave para entender la revolución científica. El retorno a la Biblia y su libre examen, permitió recuperar las referencias de Salomón para estudiar la naturaleza; los recurrentes llamados a los Salmos y los profetas para observar el cosmos y, sobre todo, el mandato recogido en el primer libro del Génesis de dominar y conocer la “creación”. Ese retorno a las enseñanzas de la Biblia por encima de otras autoridades permitió emanciparse del escolasticismo medieval, que ya había dado todo lo que podía y contemplar la naturaleza como un objeto de dominio y conocimiento al que no se aplicaban las leyes de la teología sino las de la ciencia propia.
1. Las ciencias modernas crecieron cuando las consecuencias de la concepción bíblica de la realidad fueron plenamente aceptadas. En los siglos XVI y XVII la ciencia fue liberada de las ataduras de la filosofía de la antigüedad y de la Edad Media. Se abrieron nuevos horizontes.
2. Mencionaremos alguna de las consecuencias. Ramus y Bacon rechazaron el método silogístico de la escolástica medieval señalando que era inadecuado para la ciencia en la medida en que partía de nociones y no de los hechos de la “naturaleza”. Isaac Beeckman, el gran científico calvinista de Holanda, enfatizó la necesidad de trabajar con un método científico que, evocando los Salmos, partía de la observación de la naturaleza. De hecho, Beeckman anunció el principio de inercia, y se adelantó al mismo Galileo Galilei en obtener una deducción dinámica de la ley de los cuerpos que caen.
3. Johann Lippersheim, un óptico holandés, fue quien en 1605 inventó el telescopio y así sugirió a Galileo Galilei los métodos eficientes que necesitaba para realizar observaciones astronómicas. En 1590, otro holandés, el óptico Zacharias Jansen inventó el microscopio compuesto. Un invento aumentó la perspectiva del macrocosmos; la otra reveló el microcosmos; entre ellas, las ideas sobre el espacio que el hombre ordinario tenía quedaron totalmente desechos.
4. Entre los avances científicos asociados a la reforma, podemos mencionar a Francis Bacon (1561-1626) que estableció el método científico (el mismo Bacon fue un reconocido teólogo protestante) Johannes Kepler (1571-1630), fue un piadoso luterano que revolucionó las matemáticas y la astronomía trabajando sobre la luz y las leyes del movimiento planetario alrededor del sol (y también escritor sobre teología). Otro ejemplo en Robert Boyle (1627-1691), quien enunció la ley de Boyle sino que fue el creador de la química moderna, y un protestante que aportó económicamente para la traducción del Nuevo Testamento al turco. Para terminar con esta breve reseña, podemos citar el caso de Isaac Newton (1642-1727), el mayor científico de la historia que destacó en áreas como la óptica, la mecánica y las matemáticas; también fue un magnifico economista y autor de libros de teología protestante, estos son sólo algunos ejemplos de la influencia de la reforma sobre la ciencia.
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Recogemos los aportes del Dr. César Vidal, historiador y teólogo español, especialmente en su artículo Las razones de una diferencia (4) Y Ciencia, publicado en http://www.libertaddigital.com/opinion/cesar-vidal/y-ciencia-62009/
Tomado de la Biblia edición especial, 500 años de la Reforma de Sociedades Bíblicas Unidas©