(Protestante Digital/ VyV – TENERIFE).-
El astronauta del Apolo 16, Charles Moss Duke, mejor conocido como Charlie Duke, ha afirmado que está convencido de que Dios existe luego de tener un encuentro personal con él en una experiencia que tuvo tras el intento de suicidio de su esposa en 1975, seis años después de pisar la luna.
Duke expresó que cree en Dios como lo hicieron otros científicos como Copérnico, Pascal, Newton, Einstein, e insistió en que no hay un conflicto con sus amigos científicos y su libertad de creencia.
En su conferencia titulada ‘La cara oculta de la luna’ -incluida en el Festival Starmus- ha señalado que cuando viajó en la nave «no era cristiano» y que tampoco había hecho un «viaje espiritual», pero vio la «fuerza de Dios» cuando su mujer «cambió su vida hacia una vida con alegría». En el año 2012 dijo: «Caminé en la luna por tres días»; «pero caminar con Jesús es para siempre».
Así, empezó a leer la Biblia pese a los prejuicios de los científicos, y meditando en el cristianismo llegó a la conclusión de que los hombres no pueden ser «enemigos» de Dios. «He visto muchas veces a Dios desde que tengo 42 años», ha comentado: «Ahora que soy creyente, en mi mente puedo ver y proclamar como el salmista: ‘Los cielos cuentan la gloria de Dios, el cielo proclama la obra de sus manos’».
Un peregrinaje espiritual
Charlie Duke afirmó que se formó en las teorías científicas que no dejaban lugar a Dios sin tener dudas al respecto, pero tras regresar de la luna cambió de opinión cuando vivió serios problemas matrimoniales, llegando inclusive a pensar en el divorcio. Su esposa Dottie entró en una depresión e intentó suicidarse.
En esos momentos, Duke manifestó que asistieron a un evento llamado Faith Alive (fe viva), en una iglesia de La Porte en Texas, EE.UU. El astronauta explicó: «Fue un momento emotivo para mi esposa en particular. Ella había intentado todo, pero allí entregó su vida a Jesús. Inmediatamente vi que la tristeza se convirtió en alegría, y que ella tenía un espíritu de perdón, amor y paz».
Duke dejó que Jesús tomara el control de su vida. «Después de ese fin de semana tomé la decisión: ¡Si tú eres mi Señor entra en mi vida!», dijo. «Comencé a devorar las Sagradas Escrituras, varias horas al día», relató emocionado. «En Hebreos dice: ‘La Palabra es viva y eficaz y más cortante que toda espada de dos filos’. Dios me comenzó a revelar el pecado que había en mi vida». Fue entonces cuando Duke comenzó a experimentar el mismo cambio que había experimentado su esposa: «Dios me ha librado de la ira, soledad al igual que me libró de todo lo que estaba mal en mi vida».
Desde que Cristo le cambió ha estado en varios eventos importantes, testificando sobre lo que Dios ha hecho en su vida y en la vida de su familia, incluso algunos ministros reconocidos le han invitado para que testifique su experiencia. Duke explica que «mucha gente quiere conocer a un hombre que caminó en la luna», pero la intención de Duke es «darles a conocer sobre el personaje más perfecto que caminó en la tierra, su nombre es Jesús».
El Apolo 16
El estadounidense Charles Moss Duke participó como piloto del módulo lunar Orión en la misión Apolo 16 en abril de 1972. En cuanto a su llegada a la luna en el Apolo 16, hace 42 años, indicó que tuvo una sensación espeluznante a medida que llegaban a la zona de sombras del satélite cuando, tras tres días con el sol, de repente ya no hay más sol.
La misión Apolo 16 está considerada entre las más fructíferas debido a la gran cantidad de experimentos que se hicieron durante la misma en la superficie lunar, y por la cantidad de material rocoso que se trasladó a la Tierra.
Sobre Charles Moss Duke
Charlie Duke nació en Charlotte, Carolina de Norte, EE.UU en el año 1935. Motivado por servir a su país, Charlie asistió a la Academia naval de los EE.UU en Maryland. Después de su graduación, fue enviado a la Fuerza Armada de los EE.UU y así comenzó su carrera en la aviación, que incluyó varios años como piloto de guerra y piloto de pruebas hasta que, impulsado por su comandante, se convirtió en un astronauta Apolo.
El 20 de abril de 1972, junto a John Young y Ken Mattingly, Duke aterrizó en la luna. Su estancia en ella fue la más larga registrada y estableció un record de 71 horas con 14 minutos.
Luego de su retiro de la NASA en el año 1975, Duke estuvo involucrado en diferentes actividades. Fundó y presidió la empresa Orbit Corporation, que distribuía bebidas, también es socio activo de una empresa de bienes raíces que construía centros comerciales, así como ha sido presidente e inversionista en varias otras empresas.
Charlie también sirvió en la reserva de las Fuerzas Armadas como asistente especial del comandante de Servicios de Reclutamiento de las Fuerzas Armadas de EE.UU, destacándose en su labor.
Actualmente es propietario de las Empresas Charlie Duke, que ha producido dos videos sobre el espacio, y es presidente de Inversiones Duke. También el general Charles Moss Duke, es el presidente de la Fundación de becas para astronautas en Titusville, Florida, EE.UU.
Algo que este astronauta no olvidará jamás es el cambio de vida después de haber realizado este viaje. Vivir una vida sin Cristo es andar en tinieblas, mas abrirle el corazón a Jesús y adoptar una nueva identidad en Él, lleva a la vida eterna… ¡Hágalo nunca más será el mismo!
