(Protestante Digital/ VyV – CHIAPAS).-
Según los cristianos evangélicos, autoridades de esa comunidad les amenazaron con cortarles el agua y la luz, o enviarlos a la cárcel si no colaboran con 250 pesos por familia para la fiesta religiosa tradicional de San Isidro, que se celebró en mayo.
Las seis familias cristianas se mantuvieron firmes ante los atropellos, amenazas y agresiones verbales, y están dispuestos a enfrentar las consecuencias para evitar que otras generaciones pasen por lo mismo. Los creyentes tienen el anhelo de que en la comunidad se respete a todas las personas sea cual sea su creencia y que se respeten los derechos de todos los ciudadanos.
El Comisariado Ejidal, del Síndico Municipal y el Coordinador de Seguridad Pública del Municipio, manifestó en el pasado que ya no molestarían a los cristianos y que no les exigirían la cooperación en aras de respetar la libertad religiosa.
Aunque se les pidió que dicho acuerdo se hiciera por escrito, los funcionarios dijeron que preferían no hacerlo, ya que tendrían un problema con la comunidad y no querían complicar las cosas, pero daban su palabra de cumplir el pacto.
Sin embargo, en una reciente reunión de la Asamblea local de la zona, se propuso que los evangélicos cooperaran obligatoriamente para la fiesta católica de San Isidro, y que en el caso de que no se sometieran se les cortase el agua, a lo que el propio Comisariado Ejidal (que había dado su palabra de respetar a los evangélicos) respondió que «mejor se les cortase la luz, así es más presión para los evangélicos y no habría problema para el cobro» o en su caso que «los metieran a la cárcel», manifestaron los denunciantes.
¡Basta de retóricas!
Gobiernos van y vienen en México y la situación con los cristianos nacidos de nuevo no cambia, por el contrario, cada día se vuelven intolerantes contra este grupo que pacíficamente vive su fe sin dañar ni molestar a nadie.
Es hora de que el presidente Peña Nieto y los mismos jerarcas católicos dejen las retóricas y las promesas, y frenen estos abusos de la feligresía católica en esta zona tan conflictiva de México como lo es Chiapas.