(Verdad y Vida – REDACCIÓN).-
Kerwin Márquez es un joven zuliano dedicado a la adoración de Dios desde la temprana edad de 9 años. Gracias a la motivación y enseñanza de su madre, él siempre estuvo al servicio del Señor. Nació en Cabimas, pero aun siendo un niño, sus padres se mudaron a Ciudad Ojeda, «a un barrio muy pequeño, amado por Dios» en la costa oriental del lago de Maracaibo, estado Zulia, donde creció y continúa viviendo.
Desde los 14 años comenzó a escribir canciones, sin entender lo que estaba haciendo el Señor con él. A los 15 años entró a la banda de la iglesia, «fue la primera vez que canté con una banda, como solista y fue una experiencia muy linda», comentó Kerwin. Ha sido una persona humilde y jamás se imaginó todo lo que Dios tenía reservado para él.
«Jamás me imaginé que podía salir de Venezuela, de mi entorno, de mi ciudad, vivo en la costa oriental del lago del Zulia, exactamente en Ciudad Ojeda y nunca me imaginé qué tan pronto Dios me llevaría a las naciones, y me siento muy privilegiado porque no solamente siento que tengo un don para poder cantar, que es algo que sería natural si no supiera lo que Dios está haciendo tan sobrenatural en las naciones, y es el privilegio que tengo de poder hacerlo», afirma el adorador.
Kerwin ha grabado discos, participado en maratónicas de Enlace TV, ha estado en conciertos, cruzadas, pero lo más importante para él «es saber que Dios está usando este don, este talento para impactar los corazones de los jóvenes».
Luego de algunos años en los ojos de los televidentes de Enlace TV, Dios tuvo un trato con el adorador y estuvo fuera de la pantalla por un par de años. Durante ese tiempo, Kerwin se dedicó a escribir canciones, a compenetrarse aún más con el Señor «fue el momento en que Dios me habló acerca de ‘Cambiar al mundo’», dijo.
«Cambiar al mundo» es el nombre de su producción, en la cual incluye temas que primero impactaron su corazón, canciones como: «Sonríe, no te detengas». «Esta canción, impactó mucho las vidas, las naciones. Después salió el video y tuvo muchas visitas en YouTube; pero este proyecto cambió al mundo y marcó mi corazón, porque podrán nacer muchas canciones en los discos de Kerwin Márquez pero este proyecto inició algo que marcó mi vida para siempre», reflexionó Márquez.
El disco ya tiene 3 años, «aún sigue vivo, seguirá vivo en los corazones de muchos venezolanos, de Latinoamérica y del mundo… es de mucha bendición», agregó Kerwin.
Momentos difíciles
Pero la vida de Kerwin Márquez no ha sido sólo de recoger los frutos que ha sembrado, también, como todo cristiano con llamado y propósito, ha tenido que ‘pagar el precio’ del ministerio. Hace unos años, cuando iba de gira con su banda y su madre –quien siempre estuvo a su lado-, el autobús donde viajaban sufrió un accidente, el cual tuvo como resultado la partida con Cristo de su mamá.
Kerwin estuvo al borde de perder un pulmón, a causa del accidente, y su carrera se vio interrumpida durante su recuperación física, emocional y espiritual. «Llega un punto en la vida de un creyente, hablando de un ministro de la música, donde Dios permite que tú tengas un alto para darte cuenta que realmente lo que importa en tu vida, no es lo que tú logres o lo que tú puedas alcanzar o el dinero que puedas recaudar para hacer muchos discos, lo que más importa es saber que sin Su presencia no somos absolutamente nada», explicó.
Este adorador perdió a una madre, una amiga, una confidente, una «escudera» –como ella misma le había pedido ser- una compañera para él y para los integrantes de la banda, quienes ya habían adoptado a esta mamá para ellos mismos.
Kerwin explica que «Dios me permitió nacer en ese vientre bendecido, de conocerla como una mamá, como una amiga, de conocer su lado humano, como una ministro, una pastora, como una persona de mucha bendición, mi corazón fue marcado completamente y estoy aprendiendo a vivir sin ella».
Márquez comenta que «Dios me dio la oportunidad de volver a nacer» en ese accidente y ver la mano de Dios. En ese momento, durante y después del accidente, él tuvo que tomar una fuerte decisión, tomar valor y ‘caminar sobres las aguas’ para darse cuenta de que Dios lo sostenía por encima de ellas. «Realmente sentí la paz de Dios, sentía que estaba muerto porque veía que todo a mi alrededor estaba hecho un desastre y yo estaba lleno de una paz inmensa, sentí que Dios estaba ahí».
Kerwin Márquez Ministry
Este adorador ya está de pie, camina de la mano del Señor y está enfocando su ministerio en transformar las vidas a través de la música, que los jóvenes entiendan que todos tienen un llamado y un propósito en Cristo. «Yo siempre digo en los conciertos y en los talleres que hay que cambiar al mundo dentro de cada cabeza. Esto no es difícil sabiendo que el dador de vida, Jesucristo, que murió por nosotros en la cruz, es quien hará que ese mundo sea cambiado a través de lo que Dios nos dio», agrega.
Actualmente se encuentra dictando talleres de adoración y asistiendo a los eventos que se realizan en Venezuela para ejercer su llamado de adorador y profeta, para que el país sea impactado.
Este joven ministro de la música, que perdió a su papá, a su mamá y que estuvo cerca de perder su voz, busca dar a conocer lo que Dios le dijo un día: «Mi voluntad es agradable y perfecta para mí, no tiene que serlo para ti, podrá venir mucha tribulación a tu vida y permitiré que pasen muchas cosas que van a impactar tu corazón, pero mi voluntad se va a hacer realidad en tu vida quieras o no».
«Si estás pasando por una tribulación, Kerwin Márquez te está diciendo que perdió a papá, perdió a mamá y está de pie para recordarte que Dios existe y que Él quiere darte lo mejor», concluyó.
