(Verdad y Vida – REDACCIÓN).-
En entrevista a la recientemente candidata a la Alcaldía del Vendrell, una ciudad de la Provincia de Tarragona, España, Elisabeth Rodríguez de Castro, se pudo conocer que en este país «hasta ahora, no ha existido una participación directa de cristianos en la vida política. Aunque puede que en alguna ocasión se trabajara en algún intento de participación, pero nunca ha llegado a tener la transcendencia como para hablar de experiencia como cristianos», explicó.
Agregó que «por diferentes razones históricas de nuestra nación y posturas teológicas, la participación política de cristianos ha sido muy escasa hasta ahora y envuelta de muchísimo prejuicio. Es ahora, en este último tiempo, que se ha empezado a hablar y a generar inquietudes sobre la responsabilidad de participación, no solo en política, sino en poder incursar en diferentes áreas de influencia social».
En cuanto a la influencia política se refiere, «en España, contamos con uno de los dos grandes partidos que han gobernado en diferentes momentos de nuestra etapa de democracia y del cual se podría decir que la base de su pensamiento político es el humanismo cristiano, por lo que muchas de sus políticas están enfocadas desde los valores, como lo son, la defensa de la familia como base importante en la solidez de nuestra nación», explicó Rodríguez.
De la misma manera, enfatizó que aunque está a favor de la política, «no creo que todos los ministros cristianos tengan que incursar o que sea su lugar. Creo que es algo muy personal y pienso que nunca es bueno generalizar nada. En mi caso, junto con mi esposo pastoreamos en España, y en este caso, tenemos claro que parte de mi llamado o vocación es desarrollarme en política. La iglesia ha vivido el proceso conmigo. Es parte de mi ministerio, y me han apoyado en lo personal. Entienden mi trabajo y mi ocupación».
Asimismo explicó que la misión de la Iglesia es la de apoyar todos aquellos valores como la defensa de la vida, la verdad, la igualdad o la justicia, entre otros. «Y la realidad es que cuando la iglesia entiende su misión, se convierte en un agente de cambio, afectando increíblemente una sociedad».
«Pastoreamos dos iglesias y trabajamos con pastores a nivel nacional, mi esposo es mi mayor apoyo y motivador, pero también todo el equipo que está detrás. Creo que como pastores hemos de enseñar a las personas que hay que ser influencia, y en esto los ministros tenemos un papel muy importante y es el entender que hay personas dentro de nuestras iglesias a las que motivar y potenciar las inquietudes que tengan», agregó Rodríguez.
Continuó diciendo que «es un error, tanto la postura de demonizar la política, como hacer de ella una herramienta de ego personal. Es un tremendo error si se piensa que el solo hecho de ser cristiano, es suficiente para trabajar en política. Necesitamos cristianos verdaderos en la política, hombres y mujeres que sean personas idóneas, capaces, con una vida íntegra, honestos y que lleven el nombre del Señor muy en alto en su trabajo político y su conducta diaria. Personas que se hayan desarrollado profesionalmente, con estudios y preparadas intelectualmente».
Aseveró que no solo es la política lo que puede atraer a personas con actitudes incorrectas. «Hemos podido ver la ambición y seducción de poder, en muchas ocasiones, en ministerios o personas que se dicen cristianas. La corrupción está en el corazón del ser humano, y hablar de que «algo» te corrompe es desviarnos de lo que la Biblia nos enseña. No es lo que hay a tu alrededor lo que te ensucia, es tu actitud ante ello. Necesitamos ser esa luz y sal en lugares donde no estábamos. Esta es mi forma de verlo, de encajar este compromiso con la fe».
De acuerdo al crecimiento evangélico en España, Rodríguez considera que aún se encuentran en un momento muy «embrionario», en lo que respecta a la concienciación de la participación cristiana en la política y hacer una valoración de ello, no sería equilibrado, es más, considera que todavía hay muchísimo por hacer para poder llegar a hablar de influencia en la política. «Pero lo que sí creo es que el voto de la iglesia, está enfocándose hacia aquellos partidos que tienen la esencia propia de llevar en sus programas, la defensa de los valores morales y familiares».
¿Qué recomendaciones le daría a los cristianos que tienen inclinaciones en la política?
– La primera recomendación que yo siempre hago es, autoevaluarse; es decir, antes de comenzar un compromiso público, hacer una reflexión interna del motivo por el cual, creo que he de incursar en política. Puede haber una motivación completamente personal, y ésta muchas veces no será lo suficientemente sólida para llevar a cabo todo el proceso por el que se habrá de pasar hasta poder desarrollarte ampliamente dentro de un partido, o proyecto político. Incursar en política no es sencillo, porque hay muchísimo trabajo y muchas horas invertidas para poder llevar a cabo tu trabajo. Es un camino que «no es sencillo» pero cuando tienes la vocación o entiendes que tienes la responsabilidad de ser parte de ello, lo afrontas con «emoción y ganas».
Agregó como segunda recomendación: «¡Prepárate! Las personas que no estén formadas, han de estudiar y formarse para aquello en lo que quieran desarrollarse profesionalmente. Uno ha de llegar con experiencia y con conocimiento».
Concluyó animando a todos los que tienen inquietudes políticas, siendo cristianos para que sean agentes de cambio en sus ciudades. «Debemos resetear el pensamiento de que estamos sólo para trabajar solamente dentro de nuestras iglesias. Quiero motivar a los jóvenes a conquistar áreas a través del derecho, la justicia, los medios de comunicación, la cultura. Que nos levantemos como iglesia y entendamos que podemos transformar nuestro alrededor y hablar de nuestras naciones desde otra perspectiva. Animar a los pastores a que motiven a su gente para conquistar estas áreas que las hemos dejado perder y que podamos llevar a la arena pública, nuestros principios y valores».
Elisabet Rodríguez de Castro
Es responsable de las Relaciones del Partido Popular (PP) con los Protestantes (partido que actualmente gobierna en España) desde la Secretaría de Justicia, Derechos y Libertades.
Fue candidata a la Alcaldía del Vendrell, una ciudad de la provincia de Tarragona y aunque no resultó electa, tuvo una gran aceptación. Destaca su larga trayectoria de trabajo voluntario en el ámbito del asesoramiento familiar, la formación y la capacitación en áreas diversas de voluntariado social y liderazgo evangélico. Presidenta de la Asociación Nacional de Madres y Padres Evangélicos (AMPE), Forma parte desde hace años del Grupo de Participación en la Vida Pública de la Alianza Evangélica Española, donde es responsable de las relaciones con el PP, Junto a su esposo, el pastor Miguel Ángel Acebal, lidera la Misión Carismática Internacional (MCI) en España.