(Verdad y Vida – REDACCIÓN).-
El presidente de Nueva Visión para mi País (NUVIPA), Humberto Padilla, hace un análisis del papel que los cristianos venezolanos han tenido en la política y aclara que esta experiencia se circunscribe a dos grandes momentos: Primero, en los años 80 con la creación del partido Organización Renovadora Auténtica (ORA) y, en el tiempo actual, donde hay una mayor participación de cristianos en la política.
«ORA, fue una gran novedad en medio del pueblo de Dios, llegando a tener diputados en el parlamento. Ellos mostraron que el pueblo de Dios puede unirse en torno a una causa y puede obtener buenos resultados», enfatizó Padilla. Agregó que creen «que lo que faltó fue supervisión, ministros haciéndole seguimiento al trabajo de esos hermanos y sugiriendo oportunas correcciones para que no hubiera desviaciones».
En cuanto a NUVIPA, Padilla explicó que debido a lo aprendido de la experiencia de otros, esta organización «tiene una asesoría apostólica y profética en el más alto nivel de dirección, de manera que haya por encima de la consagración de cada uno de los líderes del movimiento, una figura rectora, consejeros que estén alertando sobre la actuación del día a día».
Reconoció que en su experiencia en el gobierno como «alto personero en el área de las finanzas», no obedecía a un plan de gobierno basado en la Biblia, «sino a un plan de gobierno marxista. Llegó el momento en que fueron tales las contradicciones entre mis creencias y las ideas de gobierno que tenía que aplicar, que decidí renunciar para evitar más conflicto».
Padilla estableció que las propuestas políticas de los cristianos no han tenido mayor influencia en el gobierno, pues no hay reconocimiento de la Iglesia Cristiana en el país. Esto se evidencia al registrar iglesias como asociaciones civiles, al no reconocer el llamado y labor de un pastor, la destrucción de templos, en que no hay igualdad en la libertad de cultos, entre otros. «No apoyan a los cristianos, nuestra cultura, ni nuestras ideas».
Informó no estar de acuerdo con aquellos que tildan a la política como una actividad «del diablo», pues los gobernantes reflejados en la Biblia, como David, José, Daniel, Josué y Moisés, también lo serían. «‘Si de Jehová es la tierra y su plenitud, el mundo y los que en él habitan’, entonces el diablo, donde quiera que se manifieste, es un usurpador, un ladrón y no el legítimo propietario de nada, porque nada le pertenece», aclaró. «El Señor Jesús dijo: ‘Toda potestad me ha sido dada’. Toda, el diablo no tiene nada».
Como hijo de Dios anima a los cristianos a arreglar lo que otros han dañado y a no «enterrar la cabeza como el avestruz. Moisés no le corrió a Faraón, lo enfrentó y con el poder de Dios, lo venció», comparó.
«Nosotros en NUVIPA creemos que es la hora de los ministros. Que el día en que los apóstoles y los pastores pisen la Asamblea Nacional en carácter de diputados la tierra va a temblar, el enemigo, los políticos van a temblar porque se les ha acabado su tiempo. Este es el día y esta es la hora, no hay otra. Después vendrá el momento de los técnicos, pero este compromiso tan grande es el de los ministros de Dios. Y si Dios te está llamando a pastorear una nación, no le digas que prefieres quedarte en tu congregación mientras 30 millones de personas padecen penurias y no ven destino cierto para sus vidas», estableció Padilla.
Como pastor y también como político dijo que «tiene que dolernos esos viejitos, mujeres y niños haciendo colas durante días enteros para comprar alimentos de la cesta básica, si no nos duele eso, hay que volver al cuarto de oración a ver qué paso con nuestro cristianismo, dónde se nos perdió».
En cuanto a la influencia de los cristianos en la política venezolana, el presidente de NUVIPA explica: «Creemos que no hay ninguna influencia. Somos entre 6 y 8 millones de hijos de Dios que confesamos a Cristo y, sin embargo, han intentado legalizar el matrimonio gay porque simplemente no nos hemos dado a respetar». Por sobre eso, NUVIPA como organización cristiana, hace su labor y sobre este tema, presentó más de 68 mil firmas rechazando el matrimonio gay en la Asamblea Nacional.
«Hablando de crecimiento, de la influencia cristiana en el país, muchos de los que estamos en NUVIPA somos además parte de un plan de evangelismo denominado ‘Casas de paz’, en el que se hace una serie de visitas a un hogar hasta que la gente nueva creyente en Cristo comienza a asistir a una congregación, y luego se les anima a entrar en un plan de formación hasta convertirlos en líderes cristianos», explicó.
El año pasado, alcanzaron 720 mil hogares a nivel nacional con este plan de evangelismo. «Los cielos están abiertos, la mies es mucha, yo te animo pueblo de Dios a que salgas a buscar a los que se van a convertir, pero no hablándoles en un autobús y luego no sabemos que más pasó con esa persona, sino visitándolos metódicamente hasta convertirlos en discípulos. Al fin y al cabo, la orden del Señor Jesús nos dice: ‘Hacer discípulos’», exhortó.
Concluyó llamado la atención de los líderes cristianos de aquellos de sus miembros que tienen el llamado del Señor a la política que «no los satanicen, más bien que los ayuden, aconsejen y aúpen para que sean un excelente testimonio de lo que el entrenamiento cristiano puede hacer con un hombre común. En segundo lugar, que acudan a nosotros a prepararse y estudiar. En el año 2014 hicimos 8 seminarios de política, que forman parte de un gran Diplomado en Estudios Políticos, y este año abre sus puertas la Escuela Superior de Formación para la Administración Pública, que es un centro formativo dirigido por gente de Dios, con un pensum de estudios que nos llevará desde las teorías clásicas de la política, filtradas a través de la Biblia, a preparar a los administradores públicos y los políticos que Venezuela necesita».
Humberto José Padilla
Es graduado en Educación, en Tecnología con postgrados en Instituciones Financieras y Administración Pública, así como un Diplomado en Finanzas. Es presidente de NUVIPA, pastor y consejero de grupos de hombres desde 1990, fue viceministro encargado del Ministerio del Poder Popular para las Finanzas, asistente del viceministro del Poder Popular para la Salud para atención de los niños de la calle, administrador de la empresa de cobranzas del Centro Simón Bolívar, gerente de Grandes Negocios por 19 años del Banco do Brasil y profesor universitario.