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Ni show ni competencia: ¡Es Reino!

En una nota difundida por el diario español El País, destaca la inauguración del megatemplo católico que albergará a 100 mil fieles de esa religión en la ciudad de Sao Paulo, en la misma estuvo presente el «cura star» Marcelo Rossi oficiando la misa inaugural; todo esto «copiando las megaiglesias evangélicas y de otras confesiones», destacó el rotativo.

Ahora la religión católica cree que a través de una liturgia émula de la Iglesia Cristiana podrán ripostar la gran pérdida de miembros, por eso hoy en Brasil existen «curas popstar con fans de un estilo de celebración que incluye coreografías, estribillos pegadizos y músicas de los más variados ritmos. Las macromisas están de moda en un país con 123,3 millones de católicos (el 64,6% de la población)».
El País enfatiza que «una de estas misas se realizó el pasado sábado 20 de octubre, en Fortaleza; Reginaldo Manzotti, un representante de esta cosecha de clérigos de la organización Renovación Carismática, cantó y rezó para una masa calculada en 1,6 millones de personas. Este movimiento, que empezó en Estados Unidos en 1960, vive ahora su auge en Brasil. En Sao Paulo, las multitudes se apiñan en grandes carpas alquiladas para ver al sacerdote -y cantante- Marcelo Rossi, que más de una vez ha reunido a un millón de personas y ha sido uno de los pioneros en este tipo de misa de masas».
El viernes 2 de noviembre este cura inauguró un macrotemplo que se una manera de enfrentarse al auge de los evangélicos. Un «¡Viva Jesucristo, viva nuestra señora madre de Dios!», exclamó el sacerdote al iniciar la multitudinaria liturgia con que se inauguró el mega templo ‘Santuario Mae de Deus (Theotokos)’.
Es indudable que el Vaticano está sumamente preocupado por el cada día más drástico descenso en su feligresía en Latinoamérica que está permitiendo este tipo de shows religiosos con el único fin de competir con la Iglesia Cristiana y tratar de frenar la creciente deserción en sus filas.
Para muestra está el propio Brasil, según el último censo, del 2010, del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística, los evangélicos han crecido un 61% en los últimos 10 años. Y ni hablar de Argentina, Colombia, Guatemala y la mayoría de las naciones de América Latina y África.
Lo que no han percibido los jerarcas católicos, y menos su ala carismática, es que el Evangelio no consiste en shows ni se puede mantener una feligresía a fuerza de «pan y circo». Lo que la Iglesia Evangélica viene haciendo es más que meros actos con alabanzas, arte escénico y danzas; es predicar el Evangelio como alternativa de vida; es recoger la cosecha ya preparada por Dios para estos tiempos del fin; es dejar que el Espíritu Santo glorifique la obra de Jesucristo, por eso en nuestros eventos vemos grandes sanidades, milagros asombrosos y miles de conversiones genuinas a Jesucristo.
Los ministros evangélicos, sean adoradores o predicadores no van a los eventos evangelísticos a exhibir sus talentos como sí lo hace Marcelo Rossi y otros, en nuestros eventos sólo brilla el nombre de Jesucristo, pues sólo de Él es la gloria. Los evangélicos no competimos con ninguna secta o religión, sólo hacemos lo que el Señor nos mandó y es Él a través de su Santo Espíritu quien se glorifica, sana y salva a las personas.
Jesús nos mandó a establecer su Reino en la tierra, no ninguna religión, lo que hace la Iglesia Cristiana es simplemente alabar y adorar al Señor, predicar de su gracia y dejar que sea Él mismo quien convierta a las personas. Si la religión católica desea que su gente no deje sus templos es menester que vuelva a la sencillez del Evangelio; que dejen de predicar herejías anti bíblicas como: «¡Viva Jesucristo, viva nuestra señora madre de Dios!»; que dejen de venerar y honrar imágenes y busquen de Dios a través de un genuino arrepentimiento; que reciban a Cristo como su único Señor y Salvador sin adicionar ningún co-redentor, sea María o los apóstoles; y deben dejar que sea el Espíritu Santo y la Biblia quienes dirijan a la iglesia, tal y como sucedió en los tiempos apostólicos.
No es copiando metodologías ni programas que el catolicismo retendrá el éxodo en sus filas, es estableciendo el Reino en la tierra así como Jesucristo lo ordenó, no como su institución religiosa y sus jerarcas lo han establecido por encima de la Biblia. Jesucristo es el único Salvador y Señor, nadie más. Las Sagradas Escrituras son la única norma de fe y conducta a obedecer, no el catecismo u otras interpretaciones; pero eso es tanto como reconocer que llevan más de 1.600 años equivocados y desviados de la Verdad. Por eso el éxodo dentro del catolicismo continuará, así salten, canten y monten los shows religiosos que sean.

director@verdadyvida.org

@georgesdoumat

 

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